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Zacatecas.— El general de brigada retirado Ignacio López Flores asumió la dirección del penal varonil de Cieneguillas, donde dos riñas registradas entre el 31 de diciembre y el 2 de enero dejaron un saldo de 17 internos muertos y 10 heridos.

Tras los enfrentamientos registrados en ese penal fueron reubicados 165 reos del fuero federal, con lo que se logró descabezar los liderazgos de los cinco cárteles que disputan el gobierno en la cárcel, señaló Ismael Camberos Hernández, secretario de Seguridad Pública (SSP).

Destacó que López Flores, quien tiene 40 años de experiencia en las Fuerzas Armadas y 10 en el sistema penitenciario —como director de los Centros de Reinserción Social en Tabasco, Zacatecas y Oaxaca—, asumió la dirección del penal con “gobernabilidad”.

Añadió que este relevo forma parte de las acciones contundentes para fortalecer el sistema penitenciario en la entidad, así como una medida para reforzar las acciones de seguridad, reinserción social y respeto irrestricto de los derechos humanos.

Alerta. En una reunión con representantes de los medios de comunicación, en la que se informó de la situación del penal varonil de Cieneguillas, el gobernador Alejandro Tello Cristerna y el secretario de Seguridad Pública, Ismael Camberos Hernández, coincidieron en que esa cárcel no dejará de ser “una bomba de tiempo” mientras albergue reos afines a grupos de la delincuencia organizada. En esta condición están 160 internos del fuero federal.

Sin embargo, destacaron que después de una década han logrado “por primera vez” tener el control de este centro penitenciario que ha sido vulnerado o ha “tratado” de ser controlado por presuntos integrantes de diferentes cárteles.

Por ejemplo, mencionaron que hace 10 años el grupo dominante en el interior eran Los Zetas, después fueron los integrantes del Cártel del Noreste, los del Cártel del Golfo, Los Talibanes, que en diferentes momentos —incluso— buscaron apoderarse de algunas áreas, como la de visita conyugal.

Ahora, con los recientes hechos, refieren que las pugnas se centran entre los cárteles del Golfo y el de Sinaloa, estos últimos son los que buscaban tener el control, incluso, se presume que pudieron hacer alianzas con un grupo que no pertenece a ningún cártel, denominado Los Paisas.

Ante este panorama admitieron que era riesgoso que continuaran esos liderazgos dentro de la prisión y se gestionó el traslado inmediato de 165 internos al penal federal de Ocampo, Guanajuato. De no haberlo hecho con esa celeridad, refieren, hubieran ocurrido más riñas o ellos se habrían amparado judicialmente, impidiendo su reubicación.

Recordaron que, en 2013, en el sexenio pasado, un traslado de reos fue lo que presuntamente molestó a un grupo delictivo que, como consecuencia, derivó en el secuestro y desaparición de  la directora del penal, Fabiola Quiroz, cuyo paradero se desconoce hasta la fecha.

Destacaron que en los tres años que van de este gobierno se ha tras-lado a 500 internos del fuero federal; ahora no sólo se han gestionado  porque inestabilizan los penales del estado, sino porque desde 2019 la Federación dejó de pagar a las entidades la partida presupuestal conocida como “socorro de ley”, sin precisar la cantidad que se usaba para la manutención de los internos del fuero federal.

Por ende, desde el año pasado, el Estado mantiene a estos internos que no se pueden trasladar, debido a que el Poder Judicial no permite cambiar de prisión a reos que se encuentren procesados.

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