El es un remedio natural muy efectivo para el cuidado de la piel. Ayudar a mantenerla hidratada y prevenir daños por la luz solar son algunos de sus beneficios. Si quieres conocer más sobre cómo usar este ingrediente en la para sacarle el máximo provecho, aquí te contamos todos los detalles.

Foto: Freepik
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Beneficios del aceite de oliva

  • Brinda una hidratación profunda: es rico en vitamina E, lo que aumenta la capacidad de la piel para absorber y retener agua. Además, posee escualeno, un lípido que puede imitar el sebo, y deja la piel tersa.
  • Reduce la inflamación: el aceite de oliva contiene antioxidantes que ayudan a calmar el enrojecimiento y la irritación.
  • Desmaquillante: es excelente para descomponer sustancias cerosas como el rímel resistente al agua y el delineador de ojos. Aunque después de su uso, es importante que laves tu rostro.
  • Es ideal para la zona de las ojeras: hidrata la delicada piel del área de los ojos y nutre las pestañas.
  • Combate el envejecimiento de la piel: gracias a las vitaminas E y K, el aceite de oliva contribuye a conservar la elasticidad de la piel y reducir las arrugas.
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Cómo aplicarlo

Según Vogue, el mejor momento para aplicar el aceite de oliva directamente sobre el rostro es cuando tu piel aún está ligeramente húmeda después de bañarte o lavarte la cara. Incluso es preferible aplicar el aceite por las noches, para que actúe en tu piel por más tiempo.

Cuando se usa solo en la zona de los ojos, aplica una pequeña cantidad en el dedo anular y cubre el área como tu contorno de ojos habitual.

También puedes mezclarlo con otros ingredientes según el resultado que desees obtener. Compartimos dos ideas:

Mascarilla de aceite de oliva y limón

El aceite de oliva y el limón son el dúo perfecto para aclarar la piel. El limón tiene propiedades blanqueadoras gracias al ácido cítrico y la vitamina C que, además de que ayudar a exfoliar la piel eliminar las células muertas. Para usar estos ingredientes sigue este paso a paso:

  • Exprime el jugo de un limón en un recipiente.
  • Mezcla el jugo del limón con una cucharada de aceite de oliva.
  • Sumerge un disco de algodón y aplícalo en las zonas con manchas.
  • Deja actuar por 10 o 15 minutos y enjuaga con agua abundante.

Exfoliante de aceite de oliva, azúcar y miel

  1. En un recipiente, añade dos cucharadas de azúcar, dos de aceite de oliva y una de miel. Mezcla con una cuchara.
  2. Lava tus manos y aplica la mezcla en tu rostro ligeramente húmedo. Da masajes con movimientos circulares, con suavidad.
  3. Deja actuar el exfoliante por 5 minutos y enjuaga con agua.

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