“Hay prácticas mercantiles e inmobiliarias en el proyecto Chapultepec”

A dos días de que la secretaría de Cultura federal y el gobierno de la Ciudad presenten los avances del proyecto Chapultepec –está programado para el 7 de noviembre— el doctor Pablo Gaytán, integrante del Frente Ciudadano para la Defensa y Mejora de Chapultepec, hace preguntas a las autoridades, al director creativo del proyecto (Gabriel Orozco) y al coordinador del Complejo Cultural Bosque de Chapultepec (Homero Fernández).

Gaytán, que hoy a las 11 horas encabezará en Paseo de la Reforma una conferencia de prensa donde se harán señalamientos sobre este proyecto prioritario del Presidente Andrés Manuel López Obrador, considera que las instituciones han hecho actos propagandísticos –por ejemplo los videos semanales con supuestos avances en los cuales, dice, no hay información ni diagnósticos, sino propaganda--, y que no han seguido los canales legales.

 “Las instituciones involucradas, Cultura federal, secretarías de Obras y de Medio Ambiente harán un acto oficial y propagandístico -- ‘avances’, dijo Homero Fernández--. Pero no es legal.  Cuando el Consejo Rector Ciudadano del Bosque de Chapultepec diga que recibió los planes (maestro y de manejo) podremos decir que están cumpliendo con los procedimientos; mientras, son eventos propagandísticos. Y una vez que el Consejo lo reciba, lo analizara, revisara y convocará a una consulta pública; entonces dará su dictamen a favor, en contra o  con modificaciones. Eso es lo legal. Cualquier intervención en cualquiera de las tres secciones reconocidas es ilegal y estaría violando los reglamentos que norman en términos de área de valor ambiental”, asegura Gaytán, en entrevista telefónica.

El profesor e investigador de la UAM Xochimilco cuestiona las afirmaciones de Homero Fernández de que se están tomando en cuenta las propuestas de los vecinos: “Es mentira. A los grupos siguen sin contestarnos las preguntas que hemos hecho, no nos han mostrado el  plan maestro ni el plan de manejo; a los artistas no les han dado una respuesta directa de si continuarán con el proyecto del pabellón contemporáneo mexicano; no nos han presentado el convenio de colaboración entre Gabriel Orozco y la secretaría de Cultura. No es cierto que estén tomando en cuenta las voces de los distintos sectores”, asevera.

También señala que la afirmación de que el deprimido o túnel de Constituyentes  será una forma de conectar con colonias populares no es cierta: “Esa obra tiene la intención, en términos de desarrollo urbano, de conectar este proyecto Chapultepec hacia el poniente con el cluster inmobiliario de Santa Fe, y con el proyecto del Cetram Observatorio. Y eso no tiene nada que ver con la justicia social de la que habla Homero Fernández, con conectar las colonias populares. Si lo vemos desde un mapa, vamos a ubicar que el túnel o deprimidido se va a conectar con el sistema de vialidades del cluster de Santa Fe que, a su vez, está conectado con la modernización de Observatorio y Tren Interurbano… En medio va a quedar aislada la población popular; eso va a cobrar un gran valor inmobiliario. Y no va a beneficiar al sector popular como demagógicamente dice Homero Fernández sino a los proyectos inmobiliarios que ya están ahí”.

Por otra parte, el integrante del Frente cuestiona el sentido de proyecto biocultural del que habla Gabriel Orozco: “Se me hace incoherente su noción de biocultura.  Esa noción ha sido utilizada por algunos teóricos para hablar de la necesidad de reconocer la relación entre comunidades indígenas y campesinas, y su territorio. Este concepto no opera en el caso de Chapultepec porque no estamos hablando de la relación con una comunidad específica que tenga su vida cotidiana en las cuatro secciones del bosque sino que hablamos de un espacio público. Hay una relación simbiótica que tenemos los ciudadanos con el bosque; no biocultural. Es distinto. Desde los ciudadanos y especialistas, es que tenemos que tener una relación de respecto y amabilidad, que reconozca esa relación simbiótica”.

Gaytán advierte que hay contradicciones de concepción entre Fernández y Orozco, y demanda que se explique qué papel juega Raúl Berarducci, director general de Bovis, que aparece entre los primeros lugares del equipo del Taller Chapultepec o qué hacen ahí los representantes de IDOM, empresa de España.  En ese sentido reitera que “Chapultepec es un megaproyecto inmobiliario disfrazado de 'Proyecto Verde Chapultepec', o  biocultural como diría Orozco. Creemos que hay evidentes prácticas mercantiles e inmobiliarias en el proyecto Chapultepec, que tiene que ver con el desarrollo del cluster del poniente de la ciudad”.

El investigador pregunta además: ¿dónde está el decreto porque el que Sedema cedió un área de diez hectáreas al gobierno de la Ciudad, al Bosque y a la Secretaría de Cultura para la Cuarta Sección?; ¿qué significa que Homero Fernández no sólo sea el director administrativo de Los Pinos y ahora del Complejo Cultural Chapultepec, así como enlace con el gobierno de la Ciudad? “¿Él recibe todos los recursos?,  ¿a él le vamos a pedir cuentas?”

“Oímos a la jefa de gobierno decir que los grupos que nos oponemos a distintas obras en la ciudad de México somos grupos no representativos. Eso lo pongo entre comillas, el tema no es si los grupos son o no representativos, el tema es que,  seamos una persona, dos, ciudadanos o artistas, estamos ejerciendo nuestro derecho a demandar cuentas a gobernantes”, concluye Gaytán.