Slim le corrige la plana al SAT

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Nos dicen que la temporada de caza de contribuyentes podría acabar como el refrán: “El mejor cazador puede ser cazado”. Nos cuentan que el Servicio de Administración Tributaria (SAT), que tiene como jefa a Raquel Buenrostro, dio a conocer que casi casi puso en cintura a una empresa mexicana del sector de telecomunicaciones con presencia en América Latina al invitarla a dar información sobre el pago de impuestos. De esta revisión, la empresa en cuestión aceptó pagar la no despreciable cantidad de más de 8 mil millones de pesos. El SAT nunca mencionó de quien se trataba. Pero al verse aludida, América Móvil, controlada por la familia de Carlos Slim Helú, envió un comunicado a la Bolsa Mexicana de Valores para aclarar que se trataba de impuestos diferidos que la propia telefónica avisó y pagó en 2019 de manera voluntaria al SAT sin que hubiera algún requerimiento de por medio, es decir, sin necesidad de que le hicieran manita de puerco. La empresa asegura que lo hizo conforme a la ley.

Nos cuentan que a casi medio año de que se presentó la plataforma Cobro Digital (CoDi), del Banco de México, de Alejandro Díaz de León, trabajada en conjunto con la banca comercial, todo parece indicar que habrá un lanzamiento fuerte. Con ello se busca que la plataforma al fin tenga presencia en comercios y la población comience a utilizarla como verdadera alternativa al efectivo. Nos platican que si bien la adopción ha sido lenta, banqueros y autoridades confían en que CoDi se consolide como medio de pago. Por ello, es muy probable que en la Convención Bancaria de Acapulco, en marzo próximo, haya un anuncio con bombo y platillo sobre el pago con CoDi en las principales tiendas de autoservicio del país. Habrá que ver si no será necesario un empujoncito fiscal, por ejemplo, para que los comercios se animen a entrarle con fuerza al programa, que tiene ante sí el reto de convencer a la población, acostumbrada a comprar y pagar con cash.

En Estados Unidos hay empresas que empiezan a resentir los efectos del coronavirus, pues se espera una menor demanda de varios productos, incluso vehículos, lo que ocasionará menores utilidades en el año. En enero, la industria automotriz en Estados Unidos tuvo una contracción de 0.6% en ventas y a pesar de que el volumen de exportación hacia China representa una pequeña parte, datos preliminares indican que las ventas de autos en China cayeron 18% en enero, y en el caso de los vehículos eléctricos el desplome fue de 54%. Ayer, el mercado accionario de EU cerró con resultados mixtos, pero empresas financieras, tecnológicas y del cuidado de la salud tienen pérdidas en el valor de sus acciones. En México aún no hay afectaciones en empresas por el coronavirus, nos dicen, pero algunos componentes electrónicos para la industria automotriz podrían dejar de importarse de China.

Recordará que el tema del etiquetado para alimentos y bebidas no alcohólicas generó una gran polémica entre el sector privado y el gobierno. Lo que se supo es que en el momento de la votación del comité de normatividad, ganaron quienes apoyaban la nueva Norma Oficial Mexicana. Pero nos dicen que el voto de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) fue contra el proyecto. La comisionada presidenta, Alejandra Palacios, afirmó que se votó así al considerar que la norma se centra en los sellos de advertencia de que los alimentos o bebidas tienen un alto contenido calórico, pero el etiquetado es restrictivo en cuanto a información adicional. Nos dicen que esto no quiere decir que la comisión esté contra el etiquetado, además de que se reconoce el problema de obesidad del país, pero considera importante que haya información complementaria en las etiquetas, y eso no se incluyó en la normatividad.