La eventual rifa o venta del avión presidencial no generará un impacto financiero importante, consideró el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

“En términos de que se venda o no, no vemos que sea una medida de impacto financiero importante”, afirmó el presidente del instituto, Ángel García-Lascurain.

En la primera conferencia de prensa del año y como nuevo presidente del IMEF, dijo que es un tema más político que financiero.

Por su parte, el presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos, Gabriel Casillas, apreció la originalidad de la propuesta que viene de la frescura de un político nuevo, en comparación con los del pasado que daban las mismas soluciones sin resolver el problema.

Lo importante es que se abren caminos para otras cosas y para otros aspectos, apuntó.

El IMEF no modificó sus expectativas para el crecimiento de la economía. Para 2019 quedó en 0% y para 2020 se mantuvo en 1%.

Por el contrario, mejoró el pronóstico para la inflación de este año, al estimar que estará bajo control, porque terminará en el mismo nivel que veían hace un mes, con 3.50%.

Los ejecutivos reconocieron que con la ratificación del T-MEC se diluye una de las fuentes de incertidumbre para las inversiones y es muy probable que entre en vigor durante el segundo semestre del año.

Sin embargo, advirtieron que esto representa sólo un ingrediente necesario para el crecimiento.

Hicieron ver que esto debe ir acompañado de un conjunto de políticas públicas coherentes enfiladas a promover la inversión privada.

Desafíos

De acuerdo con el IMEF, 2020 plantea retos importantes en un contexto en el que tanto el ciclo económico como el geopolítico a escala global parecen estar entrando en una fase de desaceleración.

Precisó que siguen latentes los principales riesgos geopolíticos, como la elección en Estados Unidos y quizá uno de los más relevantes porque el proceso se dará con una población muy dividida.

Para el corto plazo, señaló que la incertidumbre se moverá alrededor del proceso de juicio político al presidente estadounidense, Donald Trump, y la ausencia de un candidato fuerte del partido demócrata.

En la parte comercial, las tensiones entre Estados Unidos y China parece que todavía no terminan, quedan pendientes algunos temas con la Unión Europea y no se pueden descartar más protestas por el descontento social en América Latina, advirtió el instituto.

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