La economía mexicana corre el riesgo de pasar de una recesión a una depresión económica ante la falta de un programa de reactivación económica que se base en impulso a la industria nacional, a la infraestructura y edificación en el sector de la construcción, de acuerdo con el Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).

El director general del IDIC, José Luis de la Cruz, dijo que se tiene que tomar en cuenta que estamos en un país con altos niveles de pobreza, precariedad laboral , elevada quiebra de empresas, inseguridad y gasto de gobierno poco eficaz.

Por ello se debe pensar en un programa que atienda la realidad del país y que evite una que tendrá implicaciones adversas profundas y de larga duración.

Explicó que hay que considerar que la economía mexicana ya llegó “enferma” y en recesión” a enfrentar el Covid-19 , así que el gobierno federal debe definir si seguirá una política de estado desarrollador, en donde el gobierno ejerza un fuerte liderazgo en beneficio del país a través de la integración de un gran proyecto nacional.

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O, si toman la misma salida de gobierno neoliberales como se hizo en 1982, 1985, 1995, 2001 y 2009 de abrirse a importaciones y castigar a la industria nacional.

“Paradójicamente la última alternativa terminará por privilegiar al Este de Asia: la región que ha controlado el brote de coronavirus que se inició en China y que no descuidó su capacidad industrial durante la etapa más delicada de contagio”, añadió.

Es necesario que se considere que hay sectores estratégicos para la reactivación económica como la construcción, porque tiene impacto en 50 ramas de la economía; hay 11 mil unidades productivas que producen el 45% del valor agregado de la economía nacional y generan el 32% del empleo; integrar un programa estratégico de proveeduría nacional, es decir lo Hecho en México.

También otorgar a las empresas en México las mismas facilidades que se otorgarán a las importaciones; así como, garantizar el pago oportuno a proveedores de los tres niveles de gobierno y la devolución de IVA permite que las empresas puedan seguir operando y preservando el empleo. Contrario a recurrir a importaciones de manera indiscriminada se debe implementar un programa de desarrollo que genere bienestar.

vcr

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