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En 2015 murieron cada día en nuestro país cerca de 216 personas a causa de seis tipos de cáncer: de mama, cérvix, próstata, colon, estómago y pulmón.

La mayoría de los casos se podrían haber prevenido y son atribuíbles al estilo de vida de los mexicanos.

Durante la conmemoración del 70 aniversario del Instituto Nacional de Cancerología (Incan), el secretario de Salud, José Narro Robles, dijo que es necesario reconocer lo que se ha avanzado en el tema, pero aún queda mucho por hacer, puesto que todos los días se diagnostican nuevos enfermos.

“Si uno reconoce la tarea y lo que se ha avanzado, también hay que reconocer lo que queda por hacer, y es mucho. Cada día en 2015 fallecieron alrededor de 216 personas por cáncer en nuestro país; cada día se presentan y se registran nuevos casos y perdemos posibilidades de prevenir una enfermedad y evitar una enorme cantidad de problemas, dolor, sacrificio y gasto”, indicó.

En entrevista, el titular de la Ssa reconoció que el cáncer es la tercera causa de muerte en el país y que algunos de los factores que ocasionan este padecimiento son prevenibles, principalmente aquellos que se relacionan con el estilo de vida de los pacientes.

Narro Robles agregó que pese al recorte presupuestal para el próximo año, no se van a tocar los programas fundamentales para la atención de pacientes e investigación del Instituto Nacional de Cancerología.

El director general del Incan, Abelardo Meneses García, comentó que el país ha registrado 190 mil casos nuevos al año, y, en promedio, 80 mil fallecimientos; 5% de los pacientes diagnosticados son niños, cuyos padecimientos más comunes son leucemia, tumores cerebrales y de riñón.

“El tumor más frecuente en adultos es el cáncer de mama, le siguen los de cérvix, próstata, colon, estómago y pulmón. Entre 45% y 50% tienen que ver con estilos de vida. Hay factores de riesgo conocidos, como el tabaco, dietas hipercalóricas, exposición a hepatitis y virus del papiloma humano, exposición a rayos ultravioleta, falta de actividad física y estar cerca de sustancias por riesgos ocupacionales, como el asbesto o el cadmio, así como la exposición a rayos ultravioleta.

“Debe haber una corresponsabilidad, que esté en manos de los pacientes y en manos de nosotros. Hay que tener dietas balanceadas ricas en verduras, frutas y cereales, con pocas calorías y harinas, no exponerse al Sol, hacer actividad física, beber agua natural, caminar 2 mil pasos más de lo que diario caminamos, eso reduce de manera importante el porcentaje de cáncer en el país”, destacó.

Meneses García mencionó que se está avanzando sobre el Registro de Cáncer en Base Poblacional, un censo para conocer la incidencia de los diferentes tipos de esta enfermedad en cada región del país, el cual debe ser validado por la Agencia Internacional de Investigación de Cáncer, que depende de la Organización Mundial de la Salud y se encuentra en Francia.

El objetivo no es levantar el censo en todo el país, sino en zonas específicas; recabar la información de todos los casos de cáncer en el sector público y privado; la validación de los datos, el seguimiento a los pacientes y finalmente el análisis y publicación del informe tomará alrededor de tres años.

Este registro opera en la ciudad de Mérida, Yucatán, donde se está recolectando información; si el Incan cuenta con presupuesto suficiente en 2017, el esfuerzo se trasladará a Guadalajara, Jalisco; Monterrey, Nuevo León; Puebla, Puebla, y Querétaro, Querétaro.

Actualmente 92% de los pacientes del Incan pertenecen a los estratos socioeconómicos más desfavorecidos, poco más de la mitad, 52%, son atendidos con el programa de gastos catastróficos del Seguro Popular, protocolos de investigación y programas especiales.

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