EPN reitera a líderes religiosos naturaleza laica del Estado

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El presidente Enrique Peña Nieto se reunió ayer con representantes de las distintas iglesias evangélicas, cristianas y cristianas no evangélicas, a quienes les reiteró la naturaleza laica del Estado, así como el respeto de su gobierno a la libertad de religión y de creencias que garantiza la Constitución.

En el encuentro, que se llevó a cabo en la Residencia Oficial de Los Pinos, sostuvieron un diálogo abierto sobre diversos temas de interés nacional.

El Presidente y los 33 representantes de distintas iglesias dialogaron sobre seguridad, la situación económica del país, los avances en la implementación de las distintas reformas estructurales, así como de las acciones y programas impulsados por el gobierno federal para construir una sociedad de derechos, entre otros temas.

“El primer mandatario reiteró la naturaleza laica del Estado mexicano, así como el respeto de su gobierno a la libertad de religión y de creencias que garantiza la Constitución”, informó la Presidencia de la República en un comunicado.

El titular del Ejecutivo federal agradeció la labor permanente de las iglesias y asociaciones religiosas en favor de la sociedad mexicana y de las comunidades a las que sirven. Además, expresó su compromiso de sostener encuentros como éste de manera periódica con representantes de todas las iglesias del país.

Uniones. Los representantes de las distintas iglesias evangélicas, cristianas y cristianas no evangélicas de México le expusieron que no están en contra de las uniones entre personas del mismo sexo, pero sí le externaron su preocupación, porqué en la ley se puedan llamar también “matrimonios”.

“Una unión, llámenle de otra forma o como le quieran llamar, porque confunde a los matrimonios que tenemos. Se trató mucho el aspecto de que el país puede tener un problema si las familias no se siguen formando y casando y no siguen teniendo esa relación, como por ejemplo en Europa, que comenzó que dejaran de casarse y ahora tienen que importar gente para multiplicar a los ciudadanos”, aseguró en entrevista al salir de la reunión Daniel Peredo Jaime, presidente de la Confraternidad Evangélica de México.

Expresó que el titular del Ejecutivo tampoco se comprometió a nada, e incluso no les dijo si podría retirar la iniciativa presidencial que presentó para establecer en la ley los matrimonios igualitarios y con la opción de adoptar.

Peredo Jaime afirmó que esta confraternidad no está en contra de las uniones de personas del mismo sexo, pero sí mencionó que se debe trabajar a favor de las familias.

“Es para entender el área del matrimonio, no es en contra de las uniones igualitarias, ni de que ellos tengan sus derechos; de cada uno de los que estaba ahí se dijo: ‘No estamos en contra’, porque además luchamos a favor de que las personas puedan vivir una vida llena de gozo y plena en las diferentes esferas”, dijo.

“Le dejamos muy en claro al Presidente que trabajamos a favor de las familias, de la gente, de los desprotegidos, los alcohólicos, el poder hacer un esfuerzo para que esta gente pueda cambiar su manera de ser para sacarlo de un entorno donde no están conformes, obviamente una falta de identidad y que quisiéramos sumarnos a los esfuerzos de toda la gente para ayudar de esa manera a la sociedad”, agregó Peredo Jaime.

En tanto, Samuel Sánchez Armenta, obispo presidente de la Iglesia Apostólica la Fe en Cristo Jesús, aseguró que no hubo un compromiso de parte de ninguno de los dos actores, y que fue una reunión productiva que dejó satisfechos a ambos.

—¿No hay intención de que pudiera dar marcha atrás?

—De ninguna manera. Eso ya no tiene marcha atrás. Yo creo que todo sigue su curso.

Asistentes. En la reunión hicieron uso de la palabra el pastor Amador López Hernández, presidente de la Iglesia Nacional Presbiteriana de México; el obispo Andrés Hernández Miranda, presidente del Gabinete General de la Iglesia Metodista; Aarón Cortés Hernández, pastor General de la Iglesia Cristiana Interdenominacional; Paul B. Pieper, presidente del Área México de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y Abel Flores Acevedo, superintendente General del Concilio Nacional de las Asambleas de Dios.