La policía de Hong Kong registró las oficinas de Uber en este centro financiero de Asia el martes, lo que representa el más reciente contratiempo para una compañía de rápido crecimiento que encuentra resistencia de los reguladores y negocios de taxis tradicionales a nivel mundial.

La inspección llegó después de que agentes se hicieran pasar por clientes para arrestar a cinco conductores que ofrecieron el servicio a través de una aplicación móvil, como parte de una operación contra taxis ilegales.

Los cinco arrestados son sospechosos de transporte ilegal de pasajeros y de manejar sin seguro y fueron detenidos para ampliar las investigaciones, explicó un comunicado oficial.

La policía no mencionó a Uber Technologies pero la televisora local Cable TV mostró a agentes dentro de la oficina de la compañía en Hong Kong, la cual abrió en julio del año pasado, sacando ordenadores y documentos.

Uber también enfrenta desafíos en China continental, en donde la policía visitó sus oficinas en las ciudades de Chendu y Guangzhou como parte de una amplia investigación en sus operaciones.

El portavoz de Uber Harold Li, dijo en un comunicado que "asegura que todos sus vehículos tienen cobertura de seguro y los conductores en la plataforma pasan por una exhaustiva revisión de antecedentes" .

La compañía dijo que respalda a sus conductores al "100%" y aceptó la oportunidad de trabajar con autoridades para actualizar las regulaciones.

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