En 1995, López Obrador, quien recién había perdido las elecciones a la gubernatura del estado y acusaba fraude electoral, inició un movimiento de resistencia civil pacífica, en protesta por los altos costos de la Comisión Federal de Electricidad; ya como Presidente de México condonó la histórica deuda de los tabasqueños que ascendía a los 11 mil millones de pesos