El ajedrez es un juego de táctica y estrategia en el que ocurren situaciones insólitas que desconciertan y desafían la razón. Lo absurdo y lo extraño ponen a prueba la perspicacia y obligan a descubrir y a refutar lo inusitado que pretende el adversario.
Con frecuencia, la capacidad de anticipación no se basa tanto en la experiencia, sino en el presentimiento o detección de lo insólito que pudiera ocurrir.
Según el filósofo Séneca , “Lo insólito agudiza los sentidos. Y ¿por qué una cosa es insólita para nosotros? Porque miramos la realidad con los ojos, no con la razón, y no pensamos en lo que se puede hacer, sino sólo en lo que se ha hecho”. En el juego ciencia, lo insólito confunde, puesto que no se espera que suceda al estar más allá de lo sabido. Surge cuando lo subjetivo se introduce en lo objetivo. Pero si se descubre a tiempo, lo anómalo puede inspirar secuencias y combinaciones ganadoras. Vislumbrar lo inopinado es parte de la lucha. Echar mano a lo insólito suele dar la victoria.
rjavier.vargas.p@gmail.com
Partida: Mediante un insólito sacrificio de dama, las blancas crean las condiciones para cincelar un inusitado jaque mate con peón.
Blancas: N. Kaspenberg
Negras: N. Norman
Hastings, 1946
Defensa india de rey
1.c4 Cf6 2.Cc3 g6 3.e4 d6 4.d4 Ag7 5.f3 Cbd7 6.Ae3 0–0 7.Ad3 b6 8.Cge2 a5 9.g4 c5 10.h4 h5 11.g5 Ce8 12.f4 cxd4 13.Cxd4 e5 14.Cc6 Dc7 15.Cd5 Db7 16.Cce7+ Rh7 17.f5 Th8 (Diagrama. Las blancas crean las condiciones para concretar una brillante secuencia de mate) 18.Dxh5+ gxh5 19.g6+ fxg6 20.fxg6, jaque mate.
