Buscamos soluciones para reducir la pérdida y desperdicio de alimentos en México. Si te preguntaran cuántas toneladas de alimentos se desperdician cada día en el país, probablemente no sabrías qué responder. Tampoco si te preguntaran cuántos kilos de comida desperdicias tú diariamente. Vamos a ayudarte a responder estas preguntas.
En México se pierden y desperdician cada año 20.4 millones de toneladas de alimentos, según datos del Banco Mundial. Esto equivale a 56 mil toneladas por día y a 34% de todo lo producido para consumo humano. Si lo llevamos a números per cápita, cada mexicano desperdicia casi 158 kilos por año. Poco menos de medio kilo por día.
Desperdiciar alimentos no es gratis, estimándose las pérdidas económicas en el orden de 491 mil millones de pesos, aproximadamente 2.5% del producto interno bruto (PIB) de 2017. Desperdiciar alimentos significa mucho más que desperdiciar comida en buen estado. Significa desperdiciar la tierra, el agua y la energía que se utilizaron para producirlos, transportarlos, procesarlos y distribuirlos. La huella ambiental de este desperdicio es enorme. Esos 20.4 millones de toneladas de alimentos desperdiciadas en México generan 36 millones de toneladas de bióxido de carbono, lo que corresponde a las emisiones anuales de casi 16 millones de vehículos. La huella hídrica del desperdicio es también masiva. El agua utilizada en producir alimentos que luego terminan en la basura es de 40 mil millones de metros cúbicos, lo que equivale a 2.4 años de consumo de agua de todos los habitantes del país.
La pérdida y desperdicio de alimentos es el resultado de una serie de fallas que se producen a lo largo de toda la cadena: técnicas de cosecha ineficientes; instalaciones y equipos de transporte que no disponen de refrigeración adecuada; acuerdos de venta entre productores y compradores que generan pérdidas de cultivos a nivel del productor; estándares estéticos exigentes que derivan en el rechazo de productos que no cumplen con cierta forma o apariencia, a pesar de ser seguros para su consumo; normativas de caducidad que generan confusión en los consumidores al no diferenciar “fecha de vencimiento" con la de "consumo preferente"; bajos costos de disposición final de residuos sólidos, entre otras.
La buena noticia es que, si actuamos, podemos llegar a un escenario con casi cero desperdicios. La tecnología y la innovación nos pueden ayudar. Por ello, desde la plataforma #SinDesperdicio , el Banco Interamericano de Desarrollo decidió lanzar, en conjunto a una serie de socios del mundo privado y de la sociedad civil, el concurso #SinDesperdicioMéxico , el cual busca identificar y premiar a emprendedores que estén haciendo algo por resolver este problema. Las pérdidas y desperdicios de alimentos se producen en toda la cadena. El concurso busca identificar soluciones innovadoras que permitan reducir las pérdidas y desperdicios a nivel de producción primaria, procesamiento, comercialización, incluyendo mercados de abasto, hoteles, restaurantes y hogares.
No hay una bala de plata (silver bullet) para resolver este problema. Las soluciones serán específicas para problemas específicos y tendrán que venir de todos los sectores y actores: gobierno, industria y consumidores. Todos podemos ser parte de la solución. Por eso, si te preguntan cuánta comida desperdicias en un día, más importante que decir la cantidad exacta es responder que estás haciendo algo al respecto.
Si estás trabajando en soluciones para este problema, o si sabes de alguien que lo está haciendo, te invitamos a participar en este concurso para hacer de México un país #SinDesperdicio.
Especialista senior de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo