fue tajante al asegurar, antes del partido ante Canadá , que nunca ha pensado en renunciar, y debe ser cierto. Ahora, de ahí a que los dueños o directivos del futbol mexicano no hayan pensado en hacer un movimiento en el cuerpo técnico de la Selección Nacional , hay un mundo de diferencia, y eso debería estar en la mente del entrenador argentino, quien tendrá que trabajar duro desde las primeras semanas del próximo año, el mundialista, para que su equipo retome lo que ha perdido.
En esa misma conferencia, el Tata por fin hizo autocrítica y señaló lo que tanto se había mencionado en este espacio: No han recuperado la memoria futbolística y eso es su gran pendiente para el próximo año.
Porque, independientemente de lo sucedido ante Canadá , el equipo mexicano —y sobre todo Martino — tendrán que enterrar lo que ha sucedido en este 2021, y no solamente se trata de los malos resultados, sino el pobre funcionamiento y las dudas que sembraron con relación a los alcances que puede tener este equipo en la Copa del Mundo .
No entender eso puede generarle más ruido al estratega nacional, a quien de por sí al final del partido en Cincinnati hubo aficionados que le recriminaron, al igual que cuando acabó la conferencia de prensa, y lo mismo pasó en Edmonton, en donde fue abucheado por un sector de la afición mexicana que fue al Commomwealth , al momento de que el sonido local lo mencionó al dar a conocer las alineaciones.
Y es que debe entender algo el Tata : Aunque no trabaje o planee los partidos en función de lo que se diga en los medios de comunicación o hasta en el sentir popular, como también manifestó, necesita hacer que este equipo reaccione y tenga mejoría en su juego.
En 2022, a México le quedarán seis juegos de la eliminatoria, que iniciarán con la visita a Jamaica, pero son cuatro de local, por lo que no debería tener problema para clasificar, pero lo que deben hacer es recuperar el buen futbol que llegó a mostrar en el mejor momento en su gestión. ¿Cómo lograr recuperar la memoria futbolística? Bueno, tomar decisiones importantes, que incluso tengan que ver con dejar de convocar a jugadores que parecen “intocables”, pero que en realidad ya no le están dando resultados. Que no le dude en acercarse a nuevos talentos o a algunos de esos jugadores que ha dejado de lado y pudieran darle más.
Renovarse o seguir con lo mismo, Martino tiene todo al alcance de sus manos, porque —a diferencia de los entrenadores de clubes— él es seleccionador nacional y puede elegir a quien esté en mejor momento, algo que hasta ahora pareciera que no ha aplicado, ya que se ha casado con algunos jugadores que no le dan y los mantiene en el proceso.
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