Igual que para cada proceso electoral, el Instituto Nacional Electoral realizó los sorteos correspondientes para saber quiénes serían las y los ciudadanos encargados de, si aceptan, ser funcionarias y funcionarios de casilla para la jornada electoral del próximo 6 de junio.

En esta ocasión, quienes tendrán el privilegio (así lo deberíamos de ver todos) de ser invitados a integrar las mesas directivas de casilla y contar los votos son quienes su apellido comience con la letra "A" y hayan nacido en los meses de agosto y septiembre.

En cuanto supe esta noticia la compartí con alguien que reúne ambos criterios, letra de apellido y mes de nacimiento, tal y como me lo imaginaba, la respuesta fue una expresión de gusto, congruente con su forma de ser, esta persona ya está lista y esperando a que la democracia, personificada de capacitador o capacitadora asistente electoral, toqué a su puerta.

Hoy quiero utilizar este espacio para sumarme de manera activa e invitar a mis amables lectores a que se sumen a la participación ciudadana y dejemos de lado la apatía, el miedo y la desconfianza.

Ciertamente estamos atravesando por una situación muy complicada, la pandemia nos tiene maniatados en muchos sentidos, sin embargo, la gran mayoría hemos aprendido a realizar ciertas actividades necesarias (salir a comprar insumos, trabajar o realizar algún trámite) con las medidas necesarias, uso de cubrebocas, mantener la distancia física, lavado de manos y limpieza de productos, pues de igual forma puedes participar y ayudar a fortalecer nuestra democracia.

Si te invitan a participar como funcionaria o funcionario de casilla, no digas no, no inventes pretextos, date la oportunidad de conocer de primera mano la realidad de nuestras elecciones, termina con los mitos y telarañas mentales que aún circulan en diversas conversaciones. Si aceptas, podrás comprobar que cada persona es un voto y que cada voto vale lo mismo.

Además, es muy posible que el capacitador o la capacitadora que te visite, sea una de esas personas que valen la pena conocer, por el simple hecho de que la gran mayoría de estas personas son en verdad apasionadas de su trabajo, convencidas de su misión. Hace poco volví a escuchar una anécdota sobre un capacitador que, en los tiempos en que José Woldenberg era el presidente del entonces IFE, el maestro Woldenberg salió sorteado para ser funcionario de casilla, el capacitador lo visitó y al escuchar que no podía ser funcionario de casilla porque el día de la elección tenía que trabajar, el capacitador hasta le reclamo, pensando que era algún pretexto, me platican que hasta que no le enseñaron un escrito de Woldenberg explicando que no podía aceptar el cargo de funcionario de casilla, pues ese domingo tenía que presidir el Consejo General del IFE , el capacitador comprendió y se dedicó a convencer a alguien más.

Si tocan a tu puerta no te escondas, eso sí, cerciórate antes de abrir, escucha de que se trata y ojalá te convenzas de participar.

Seguramente el 6 de junio, día de la jornada electoral, podrás saludar con la distancia recomendada, a muchos de tus vecinos, seguro estoy de que te dará gusto verlos (con cubrebocas) y saber que están bien.

La democracia es un bien esencial, es de primera necesidad, todas y todos la necesitamos y depende de ti, de mí, de ella, de él y hasta de aquellos para fortalecerse y ser la herramienta idónea para expresarnos.

Si la democracia toca tu puerta, #YaSabesQuéHacer ábrele.

Por cierto, feliz XXIV aniversario (tu sabes quién eres).

Google News

TEMAS RELACIONADOS