Beijing/Washington.— La ciudad china de Wuhan, donde surgió el primer brote de coronavirus en diciembre de 2019, comenzó ayer a levantar un bloqueo después de dos meses. La reapertura del epicentro del Covid-19 marca un punto de inflexión en la lucha del país asiático contra la enfermedad, la cual se ha propagado a más de 200 naciones y territorios.

Guo Liangkai, un estudiante de 19 años, cuyo periodo de trabajo de un mes en Shanghái se alargó a tres meses por las restricciones, estaba entre los primeros en llegar a Wuhan en un tren de alta velocidad ayer por la mañana.

“Me alegra poder ver a mi familia (...) Queríamos abrazarnos, pero es un periodo especial, por lo que no podemos hacerlo ni nada por el estilo”, dijo tras ser recibido por su madre en la estación principal.

Las autoridades habían tomado medidas severas para evitar que las personas entraran o salieran de esta ciudad industrial, con 11 millones de personas en el centro de China: las familias fueron confinadas a sus hogares, los servicios de autobús y taxi se suprimieron y sólo las tiendas esenciales abrían.

“Creo que la reanudación del trabajo representa un tipo de esperanza, al menos muestra que China salió victoriosa”, consideró Zhang Yulun, de 35 años, quien regresó a Wuhan para trabajar.

En tanto, la Comisión Nacional de Salud detalló que hasta la pasada medianoche local se habían detectado 45 nuevos casos, 44 de los cuales son importados.

China continental ahora tiene 81 mil 999 pacientes y el número de muertos aumentó a 3 mil 299, confirmó el organismo.

La ciudad epicentro del brote concentra aproximadamente 60% de los casos de la nación asiática, pero las infecciones cayeron bruscamente en las últimas semanas.

No imponen cuarentena

En Estados Unidos, el presidente Donald Trump anunció que finalmente renunció a aplicar la cuarentena en los estados de Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut, después de que había planteado esa posibilidad en la lucha contra el coronavirus.

“Bajo la recomendación del Grupo de Trabajo de la Casa Blanca, y tras consultas con los gobernadores de Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut, he pedido a los CDC [Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades] que emitan un fuerte aviso de viaje, que será administrado por los gobernadores, de acuerdo con la administración federal”, tuiteó el mandatario.

Más temprano dijo: “Nos gustaría ver [un aislamiento] en Nueva York, porque es un punto caliente, Nueva Jersey y puede que uno o dos lugares más, algunas partes de Connecticut (...) Estoy pensando en eso ahora. Puede que no lo hagamos, pero hay una posibilidad de que en algún momento lo impongamos”. La acción, adelantó, sería por dos semanas.

Este viernes, Estados Unidos, que registra el mayor número de contagios a nivel mundial, superó la barrera de los 100 mil. De acuerdo con los datos de la Universidad Johns Hopkins, tiene 119 mil 748 pacientes, seguido de Italia (92 mil 472) y China (81 mil 999).

“Declaración de guerra a los estados”

El estado de Nueva York había confirmado 52 mil 318 casos positivos y 728 fallecidos, con más de 200 muertes en las últimas 24 horas, según anunció el gobernador Andrew Cuomo, quien dijo que una cuarentena sería una “declaración de guerra a los estados”.

“Sería un caos y un tumulto (...) Como mandatario, yo no voy a cerrar mis fronteras”, aseveró. Dijo que lo peor de la enfermedad está aún por llegar y anunció que, tras una llamada con Trump,, se acordó acondicionar cuatro grandes instalaciones como centros de emergencia en la ciudad de Nueva York.

El gobernador indicó que se espera que mañana llegue un buque- hospital enviado por la Armada estadounidense. Además, ayer, las Naciones Unidas donaron a ese estado 250 mil mascarillas. Esta semana, el gobierno federal ya pidió a las personas que abandonen ese estado que se sometan de forma voluntaria a una cuarentena de 14 días para tratar de evitar los contagios en otros lugares de la Unión Americana.

Las autoridades de Rhode Island tratarán de identificar en su territorio a quienes lleguen de Nueva York para obligarlos a que se aíslen durante dos semanas por el brote.

Resultados en 15 minutos

La Casa Blanca dio luz verde en las últimas horas a un test para diagnosticar el coronavirus, fabricado por la farmacéutica Abbott, que da los análisis en menos de 15 minutos.

La firma precisó que la prueba ofrece resultados positivos en cinco minutos, y negativos, en 13.

Agregó que el material estará disponible la próxima semana para los centros sanitarios designados en Estados Unidos.

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