Berlín.— La huelga de advertencia de 24 horas convocada para este lunes por el sindicato del sector servicios, Ver.di, y el del ferrocarril, EVG, paralizó el transporte de pasajeros en buena parte de Alemania, tanto en trenes de larga y media distancia como en los principales aeropuertos.

Los ferrocarriles regionales y de cercanías se sumaron a la huelga en varios estados federados, lo mismo que los trabajadores de los puertos y esclusas del transporte marítimo y los del transporte urbano en siete de los 16 länder (estados) del país.

La huelga se había iniciado la medianoche anterior, aunque algunos trenes de larga distancia la empezaron el domingo, ya que la llegada a su destino debía producirse después de las 00:00 horas del lunes.

Frank Werneke, líder del sindicato que convocó la huelga, defendió la reivindicación salarial del 10.5 de incremento a los sueldos o un mínimo de una subida de 500 euros mensuales para los 2.5 millones de trabajadores del sector, mientras que los empresarios ofrecen un aumento de 5% —3% para este año y 2% para el siguiente—, así como pagos únicos libres de impuestos por 2 mil 500 euros y un incremento de la paga anual extraordinaria.

El director de negociación colectiva de la EVG, Kristian Loroch, señaló que “la república se alza, porque los empresarios se niegan. Hoy estamos en huelga porque en la negociación colectiva, a pesar de la tensa situación financiera de muchos trabajadores, no se nos presentó nada sobre lo que pudiéramos negociar seriamente”, afirmó, citado por la cadena ntv.

Desde la estación central de Berlín, un portavoz de los ferrocarriles alemanes Deutsche Bahn (DB) señaló que “la megahuelga de EVG está paralizando al país”, y detalló que al igual que en la capital alemana, las estaciones de toda la nación se encuentran vacías.

“Millones de pasajeros que dependen de autobuses y trenes están sufriendo las consecuencias de esta huelga excesiva y exagerada”, agregó, y recordó que “no todo el mundo puede trabajar desde casa”.

Apeló al sindicato a “volver rápidamente a la mesa de negociaciones” y calificó de “muy desconcertante que ya estén de huelga” y sólo estén dispuestos a negociar de nuevo dentro de cinco semanas.

“Una solución a este conflicto salarial sólo puede encontrarse en la mesa de negociaciones y nosotros hemos puesto una oferta sobre la mesa”, aseguró, al tiempo que reconoció que las posturas todavía están muy alejadas.

El líder de Ver.di, Frank Werneke defendió la huelga de advertencia en el transporte en Alemania al inicio de otra ronda de negociaciones colectivas para el sector público.

“La jornada de huelga en el sector del transporte pretende dejar inequívocamente claro una vez más a la patronal que los trabajadores apoyan claramente nuestras reivindicaciones”, declaró el líder sindical.

Desde la medianoche unos 350 mil trabajadores de diversos sectores de todo el país —120 mil afiliados a Ver.di y 230 mil empleados del ferrocarril y de los autobuses de larga distancia— estaban convocados a la huelga de advertencia.

Las estaciones de ferrocarriles y los principales aeropuertos, entre ellos los de Frankfurt y Múnich, aparecieron desiertos. En la terminal aérea de Berlín, por el contrario, no se interrumpieron las actividades.

Sólo en el aeropuerto de Frankfurt, el principal nudo de comunicaciones aéreas del país, se vieron afectadas mil 170 conexiones, así como 160 mil viajeros. En el de Múnich, donde el paro de actividades comenzó desde el domingo, se cancelaron mil 500 vuelos, con unos 200 mil viajeros afectados.

La huelga de 24 horas del sector público coincidió con el inicio de la tercera ronda de negociaciones salariales en Potsdam, la capital de Brandeburgo, el länd que envuelve a Berlín.

La ministra del Interior, Nancy Faeser, apeló a la responsabilidad de los agentes sociales para alcanzar “buenas soluciones” para los empleados del sector público federal y municipal.

Para la ronda de negociaciones se han previsto tres jornadas, tras las cuales, de no haber acercamiento, podrían convocarse nuevas huelgas o delegarlo a una comisión de arbitraje.

EVG tiene previstas nuevas conversaciones con las distintas empresas ferroviarias a partir de mediados de semana, mientras que las negociaciones con Deutsche Bahn continuarán sólo después de Semana Santa.

Las negociaciones para el sector público afectan a aeropuertos por los empleados municipales, pero también las locales para los servicios de tierra.

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