El primer ministro japonés, Yoshihide Suga, extendió hoy por un mes hasta el 7 de marzo el estado de emergencia por la pandemia de la COVID-19 en las regiones críticas.
Actualmente el estado de emergencia cubre once de las 47 prefecturas de Japón, entre las que se cuentan Tokio y las vecinas de Kanagawa, Chiba y Saitama, y también las de Aichi, Gifu, Osaka, Kyoto, Hyogo y Fukuoka, dijo Suga en una reunión del grupo de trabajo del Gobierno contra la COVID-19.
Mientras tanto, la prefectura de Tochigi, ubicada al norte de la capital, seráeliminada de la lista de emergencia ya que los casos de COVID-19 han disminuido en el área.
El estado de emergencia, declarado por primera vez por el líder japonés en enero para el área metropolitana de Tokio, así como para algunas otras áreas urbanas importantes que están densamente pobladas, incluida Osaka, estaba originalmente programado para finalizar el 7 de febrero.
Desde que se declaró el estado de emergencia se ha pedido con más énfasis a las personas que se abstengan de hacer salidas innecesarias al aire libre y que trabajen desde casa. También se ha pedido a los bares y restaurantes en particular que acorten su horario de atención y cierren sus puertas antes de las 8:00 de la noche.
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