Nadie supo si el coraje del diputado local de Morena, Carlos Castillo Pérez, fue porque la presidenta de la Mesa Directiva, Margarita Saldaña Hernández, no le permitió cambiar un punto de acuerdo de último momento, o porque entregará malas cuentas a la Jefatura de Gobierno.

El morenista exigía cambiar de última hora un punto de acuerdo en la orden del día, por uno nuevo. Sin embargo, la presidenta de la mesa le recordó que eso es ilegal y, obviamente, la Ley Orgánica y el Reglamento no lo permiten.

Pero Castillo Pérez, sin respetar la norma para que le fuera cedida la palabra, interrumpió casi a gritos a Saldaña Hernández para que aceptara su propuesta, “porque es para beneficiar a la jefa de Gobierno. Entienda”, exigió, ordenó, imploró casi con llanto el morenista.

Sin embargo, la panista no se dejó amedrentar y le leyó los artículos del reglamento para que le quedara claro al diputado.

Aunque el legislador no entendía de razones, sobre todo cuando una de sus compañeras, Marisela Zúñiga, que por cierto viajaba en su vehículo en plena sesión virtual, como otros diputados locales, también le exigió a la presidenta de la mesa aceptar la petición de Castillo Pérez.

Por ello, el vicecoordinador del PRD, Jorge Gaviño Ambriz, pidió a Margarita Saldaña poner orden y a “Carlitos” —como siempre le ha llamado—, le exigió respetar el reglamento y el pleno, “porque su punto de acuerdo podrá ser el más importante, pero para todo hay reglas, hay orden. Le pido que respete”.

La discusión se prolongó por más de 30 minutos, pese a que la sesión comenzó tarde, debido a que los diputados siguen sin saber manejar las iPad; es decir, tanto para pasar lista, como para votar, tardan más que en discutir o, en su caso, aprobar algún dictamen, iniciativa o punto de acuerdo.

Lo que exigía Castillo Pérez era pedir al Instituto Nacional Electoral (INE) dejar sin efecto la prohibición de la difusión en medios de comunicación del Segundo Informe de labores de la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, “toda vez que violenta los derechos humanos y a la Transparencia de Acceso a la Información Pública”, alegó.

Sin embargo, no pudo meterlo de último momento a la orden del día, por lo que cada que podía interrumpía la sesión o dejaba abierto el micrófono de su computadora, con lo que Saldaña Hernández a cada momento le pedía apagarlo para no interrumpir la sesión.

Incluso, su compañero de partido, Emmanuel Vargas Bernal, aprovechó el alegato y durante la transmisión expuso: “Van a empezar de mamadores”, por lo que encendió a las redes sociales, y la gente le pidió respeto, “diga a quién se refiere, a los que votaron por usted. Qué lamentable vocabulario”, le reprocharon, pero el morenista los ignoró y siguió con su andar por la calle en plena sesión ordinaria.

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