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Tampico.— Con 11 años de edad, Sebastián Zertuche Hernández ya arma y diseña robots, por ello no dudó al compartir que tiene un gran sueño: “Quiero ser un gran inventor”.

Extrovertido y alegre, el niño tamaulipeco relató la forma en que sigue los consejos de su mamá, Dulce Antonia Hernández, para canalizar sus ideas, “le platico las cosas que se me ocurren y ella me dice, tú apunta todo y un día lo podrás lograr”.

Junto con sus compañeros Erick Bustos, Pablo Ramírez y Germán Rodríguez, este domingo comienzan su participación en el VEX Robotics World Championship 2018, en Louisville, Kentucky, Estados Unidos. Con sus profesores Cristian Moreno, Jesús Hernández y Leticia Rojas obtuvieron su pase al Mundial de Robótica los días 13 y 14 de marzo en el nacional en León, Guanajuato, representando a la academia Robotik World Center de Tampico.

La directora de la academia, Soraya Vázquez, explicó que luego del triunfo no contaban con los recursos para viajar al mundial, se organizaron con actividades y buscaron el apoyo de la ciudadanía. Luego de una nota publicada en EL UNIVERSAL, los contactó la compañía mexicana Seguritech, del empresario Ariel Picker, para decirles que los apoyarían con hospedaje y los boletos de avión de ida y vuelta.

“Estamos muy agradecidos, fue un sueño que era muy difícil de lograr. No pude evitar llorar cuando les dije a los padres, ellos están muy agradecidos con Seguritech”, expresó.

Por la mañana, los niños acuden a sus respectivas escuelas públicas o colegios particulares y por las tardes van a la academia como si fuera un taller extraescolar. Aprenden desde construcción y habilidad motriz, después empiezan a desarrollar proyectos, se les enseña programación y aprenden cómo funcionan las bases de un robot. Después empiezan a crear robots.

El profesor Cristian Moreno, quien viaja a su sexto Mundial de Robótica, dice que lograron su pase con el premio de excelencia entre 36 equipos de todo el país y ahora competirán contra China, Singapur, Colombia, India, Arabia Saudita y la delegación más grande de Estados Unidos.

El maestro Jesús Hernández consideró que este tipo de robótica tiene un carácter tipo deportivo, “aparte de todo el conocimiento y la educación que trae de fondo, son equipos que van muy preparados. Como un deporte hay que sacar las mejores capacidades de todos ellos”.

Sebastián compartió su sueño; “crear un robot asistente, que ayude a quienes no puedan hacer algo, por ejemplo, a los discapacitados”.

Pablo Ramírez, con 11 años, comentó el papel que tiene en la competencia, “yo diseño, hago el robot en la computadora, programo en el mundo virtual, soy driver”; Erick Bustos tiene 12 años y estudia en sexto año. En seis años que lleva en la academia lo que más ha desarrollado es diseñar y armar el robot. A Germán Rodríguez, de 12 años, desde pequeño le gustaba jugar con legos, actualmente se encarga de programar el robot.

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