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Monterrey.- La agrupación Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León (Fundenl) informó que una madre de familia localizó el lunes los restos de su hijo Juan Pablo, cuyo paradero se desconocía desde enero.
Irma Leticia Hidalgo, directora de Fundenl, señaló que la madre tuvo que realizar el trabajo que corresponde a las instituciones oficiales creadas para ese propósito que, aunque con presupuesto y obligadas por la Ley, no lo hacen porque no saben, no pueden o no quieren, incurriendo en una negligencia dolosa y ominosa.
Comentó que en los primeros días de enero denunciaron 14 desapariciones que estaban sucediendo en el municipio de Hidalgo, Nuevo León y que luego se extendieron a otros municipios de la zona rural del Estado; pero la Comisión Estatal de Búsqueda , dirigida por María de la Luz Balderas y la Comisión Nacional encabezada por Quintana Osuna, “desoyeron nuestra denuncia”.
Ante la inacción de las Comisiones de Búsqueda, el sábado 15 de febrero FUNDENL realizó un operativo de búsqueda en el municipio de Hidalgo; pero “si bien ambos organismos respondieron a nuestra convocatoria, su presencia sólo obstaculizó la búsqueda”, señaló la dirigente de la agrupación civil.
Asimismo, asentó, pese a que se les había informado el motivo de realizar un recorrido de campo, se negaron al acompañamiento, mencionando que no contaban con suficientes unidades de seguridad para el resguardo.
La dirigente de Fundenl, organización que realiza sus propias búsquedas de restos humanos con el uso de un dron, explicó que en esa ocasión entregaron georreferenciación sobre once puntos concretos para iniciar la búsqueda. “Sin embargo, a más de un mes de distancia no realizaron un solo operativo de campo en alguno de los sitios señalados”, las comisiones estatal y nacional de búsqueda.
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Ante esta negligencia, aseveró la dirigente de Fundenl, “una vez más, una madre salió a recuperar el cadáver de su propio hijo”, al realizar un recorrido de campo en la zona de Potrero Grande, municipio de Hidalgo, Nuevo León.
La agrupación denunció negligencia e inoperancia de las comisiones local y nacional de búsqueda de personas desaparecidas y en particular de la estatal, cuya titular, dijo “no cumplía ni cumple con el principio de idoneidad que marca la ley”.
Expuso que la comisionada además no ha realizado acciones de búsqueda, a pesar de contar con un presupuesto de 22 millones de pesos, aunados a los 52 equipos biométricos que tiene resguardados desde que se creó dicho organismo.
“Hoy, se suma la grave omisión de no atender la demanda de búsqueda en campo. ¿Hasta cuándo la federación y las entidades federativas seguirán aparentando que buscan a las miles de personas desaparecidas en el país?
"¿Para qué propósito sirven las comisiones de búsqueda nacional y estatal si no hacen búsqueda en campo?, señaló Fundenl.
Agregó que “condenan a las personas desaparecidas a la muerte, al no buscarles bajo los principios de efectividad, exhaustividad, debida diligencia y enfoque humanitario que marca la Ley, mientras que con su negligencia, indiferencia y crueldad, mantienen a las familias en tortura permanente".
Además de esto, aseveró Fundenl, la identificación genética por parte del Instituto de Criminalística y Servicios Periciales de Nuevo León, dirigido por Porfirio Díaz Torres, es deficiente y no avanzan con los resultados sobre los restos humanos que familiares de desaparecidos han encontrado.
“No es normal que desaparezcan a las personas; no es normal que las madres tengamos que salir para encontrar los restos de nuestros hijos e hijas; no es normal que en México existan más de 61 mil personas desaparecidas y no haya acciones efectivas, oportunas y eficientes de búsqueda, ni es normal que a las y los servidores públicos les paguen un sueldo sólo por ir a sentarse en una cómoda oficina”, refirió.
afcl
