En el futbol hay rivalidades que rompen fronteras, que traspasan límites y se convierten en verdaderas guerras por el honor, no sólo de un equipo, sino de un país entero.

Este día el balompié será testigo de una batalla más entre México y Estados Unidos, dos conjuntos de gran convocatoria y que arrastran una importante jerarquía en la zona.

Con un interinato que pronto llegará a su fin y a un paso de comenzar una nueva era con Juan Carlos Osorio al frente, México tiene una única meta admisible: alargar a 34 las victorias ante Estados Unidos. Y es que este triunfo significaría obtener el boleto a la Copa Confederaciones y regresaría la alegría a una afición que no disfruta ver ganar a su selección desde aquél 4-2 en la Copa Oro de 2011.

Ha sido una tarea laboriosa, que ha requerido de un estudio cuidadoso del rival, donde el ‘Tuca’ Ferretti ha tenido que hacer frente a diversas lesiones que han dejado un tanto mermados a los nuestros, y de lograr que la guerra de declaraciones y provocaciones no distraiga a los protagonistas.

¿Cómo llegan ambos conjuntos? Si bien el combinado azteca tuvo bajas por lesión, los hombres concentrados reconocen que tienen la capacidad para afrontar con total profesionalismo y calidad el encuentro más importante. La buena noticia: Rafa Márquez podría estar listo para iniciar el juego.

Por su parte, el equipo de “Las Barras y las Estrellas” llega con sed de revancha, luego de haber perdido la final en la pasada Copa Oro, pero con la confianza de una buena racha en los últimos enfrentamientos ante México. Ojo a la estrategia que Jürgen Klinsmann pueda utilizar, pues es un técnico al que nuestro país nunca ha podido vencer, ni como jugador, ni como entrenador. Que sea un gran partido y por supuesto, nuestras esperanzas están puestas en la Selección Azteca.

Inminente llegada. Una era está a punto de arrancar en el combinado mexicano. El acertijo parece haber encontrado respuesta en un hombre de experiencia en el futbol, pero de no tan gratos recuerdos en el balompié azteca.

Su nombre es ya por todos bien conocido, Juan Carlos Osorio, quien a sus 54 años presume en su currículum futbolístico haberse formado en Europa, para luego dirigir en Colombia, Estados Unidos y México.

¿Intriga o decepción?, ¿alegría o enojo?, ¿tranquilidad o angustia? Tiempo al tiempo y ojalá este proceso de cambios sea exclusivamente en beneficio de la Selección.

Twitter: InesSainzG

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