Habría que pensar en la Crucifixión como un mero acto de fraternidad.
***
Las mejores amistades son las que no se cuentan intimidades.
***
Salimos de ciertos sueños tan angustiosos, como el sonámbulo que de pronto se despierta en el borde de un tejado.
***
Sólo logramos ser nosotros mismos al ir tras nuestro Yo más humano y sencillo.
***
Sus vicios le han hecho tanto daño, que lo han obligado a conocerse a sí mismo.