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La Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados trabaja actualmente en una iniciativa para crear un galardón que se llamaría “Medalla al Mérito Cultural Francisco Toledo”, tal y como lo lee. Llama la atención que hace unos cuantos días el diputado Sergio Mayer, presidente de la Comisión de Cultura y Cinematografía, convocó a sus compañeros a apoyar la propuesta e incluso resaltó que la importancia de esta medalla está en que “el arte y la cultura no han sido reconocidos. No tenemos un premio que reconozca lo mejor del arte y la cultura cada año”. ¿Será que Mayer y el resto de los diputados de la propia Comisión no conocen de la existencia de los Premios Nacionales de Arte y Literatura que entrega el gobierno federal anualmente, desde 1945? ¿Será que los legisladores nunca leyeron o se enteraron de lo que el artista pensaba de la clase política? —“No voy a ser diputado, no quiero tener un puesto”, dijo Toledo convencido de que sus acciones estaban lejos de cualquier fin político— ¿Sabrán los diputados que los homenajes no eran del gusto del artista? ¿Habrán consultado con la familia para usar el nombre de Francisco Toledo?
Después de Tihosuco, larga fila de espera por la declaratoria de Zona de Monumentos
Los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto se olvidaron casi por completo de las declaratorias de Zonas de Monumentos Históricos; el primero sólo hizo dos —justo el día que dejaba el cargo— y el pasado se fue sin entregar una sola declaratoria. Todos quedaron muy felices la semana pasada cuando Tihosuco, Quintana Roo, alcanzó este reconocimiento. Sólo que la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Antropología e Historia tienen mucho trabajo porque hay una larga lista de espacios a la espera de la declaratoria: Huichapan, en Hidalgo; el conjunto de edificaciones de la exhacienda Molino Flores en Nezahualcóyotl, El Oro de Hidalgo y Tepotzotlán, los tres en el Estado de México; el Cerro de San Pedro, en San Luis Potosí, y Xico, en Veracruz. ¿Para cuándo?
