Rasuran gasto para campo

Para 2020, el campo no sólo se verá afectado por el recorte al gasto contenido en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2020, sino por la reorientación que se propone hacer a través del principal programa impulsor del sector agropecuario.

Tal como llegó la propuesta a la Cámara de Diputados, se puede anticipar que será uno de los temas que generará una de las mayores discusiones, cabildeos y protestas, que si bien son de cada año, en esta ocasión se intensificarán.

Lo anterior, debido a que al Programa Especial Concurrente para el Desarrollo Rural Sustentable (PEC) se proponen destinar 331 mil 455 millones de pesos, cantidad inferior en 20 mil 635 millones a lo aprobado en 2019, que fue de 352 mil 91 millones, es decir, 6% menor nominalmente y 9.2% en términos reales.

El PEC es el instrumento de política pública que integra los diversos programas para el desarrollo rural sustentable del país.

La función básica del PEC es el impulso del sector agropecuario, no sólo en lo que compete a la productividad, sino también en la calidad de vida de la población que depende de las actividades agropecuarias.

Este programa se incluye cada año en el Presupuesto de Egresos de la Federación desde que se creó en 2003 y desde entonces la Cámara de Diputados aprueba montos importantes de recursos distribuidos en una estructura que comprende 16 ramos presupuestarios y 10 vertientes temáticas.

Las vertientes temáticas mediante las cuales se asignan recursos para el desarrollo del campo son: el ramo financiero, para la competitividad, medio ambiente, educación, el tema laboral, social, infraestructura, salud, agrario y administrativo.

Principales cambios

Sin embargo, para el proyecto 2020 trae importantes cambios, además de una disminución en el presupuesto total, que sigue la tendencia de los últimos años.

El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) destacó que desde 2012 los recursos aprobados para el PEC han disminuido en promedio 3.1% anualmente.

Al hacer un comparativo entre el proyecto de presupuesto de 2020 y el aprobado para 2019, destacó que hasta el ejercicio fiscal del presente año, el PEC distribuía sus recursos en 10 vertientes.

Sin embargo, en la propuesta del Ejecutivo para 2020 ya no se consideran recursos para la vertiente laboral, pues se presenta en ceros.

De acuerdo con el CEFP, a pesar de que se elimina este rubro al que se le aprobaron para este año 35 millones de pesos, seis vertientes vienen con menos recursos.

Los más afectados son para las vertientes de competitividad con un gasto inferior en 18 mil 286 millones de pesos, y el Social 14 mil 606 millones menos para el próximo año.

Competitividad

El CEFP ponderó la importancia del rubro de Competitividad dentro del PEC, al que se le debe dar prioridad porque se sacrificará el programa de Agromercados Sociales y Sustentables, componente que tiene 6 mil 707 millones de peso para este año, y para 2020 no se le asignaron recursos.

Otro que es considerado importante es el Programa de Fomento a la Agricultura, con una diminución de 96.6% al pasar de 2 mil 741 millones de pesos que tuvo para 2019 a únicamente 100 millones propuestos para 2020.

Para la vertiente financiera, en la que se contemplan recursos para el campo por medio de la banca de desarrollo del gobierno federal, sucede lo mismo.

FND, FIRA y Focir

Se pone a consideración desaparecer para 2020 los recursos para Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero (FND), de los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA) y del Fondo de Capitalización e Inversión del Sector Rural (Focir).

Los diputados aprobaron para 2019 para este rubro en conjunto 829.1 millones de pesos.

Si bien sólo se salvan los recursos que se asignan a través de Agroasemex, en comparación con 2019, el proyecto trae un recorte de 51.7%, con 605.9 millones de pesos.

Con ello, el Centro de Estudios advirtió que para 2020 se iban a destinar menos recursos al desarrollo productivo del campo mexicano, lo que contrasta con lo establecido en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, que tiene como objetivo impulsar la autosuficiencia alimentaria y rescatar al campo.