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El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) va a analizar con seriedad y profundidad cuáles son los posibles efectos e impactos de la concentración Disney-Fox en México, caso que se resolverá estrictamente conforme a derecho, dijo Gabriel Contreras, presidente del regulador.

Tras la inauguración de un foro sobre los derechos de los usuarios de telecomunicaciones, explicó que en estos casos se abordan específicamente todos los aspectos que ordena la Ley Federal de Competencia Económica: cuáles son los mercados implicados y cuáles son los posibles problemas o riesgos en ellos.

“El IFT tiene de tres: autorizar la concentración, puede objetar la concentración y puede autorizarla sujeta a algunas condiciones como ha pasado en Estados Unidos o en Europa”, detalló Contreras.

Disney y Fox informaron a los reguladores mexicanos en octubre de 2018 sobre su interés de fusionarse. La primera empresa controla los canales de ESPN, mientras que la segunda tiene los derechos de Fox Sports.

La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) aprobó hace unos días la concentración entre ambas empresas de entretenimiento, por lo que queda pendiente la resolución del IFT que implica los mercados de telecomunicaciones y radiodifusión.

Al IFT le corresponde analizar con profundidad cuáles son los posibles efectos e impactos que pueden tener en los mercados, subrayó Contreras.

“Es lo que hemos hecho en todas las concentraciones en las que hemos participado, están a la luz pública, lo mismo resolvimos una concentración de Televisa con Multimedios, con TVI, que una de Time Warner con AT&T y una de AT&T con Iusacell. Todas las resoluciones son públicas y ahí pueden encontrar cómo resuelve el instituto”, indicó.

El presidente del IFT añadió que “los artículos 124 y 125 de la Ley Federal de Competencia Económica obligan a todos los servidores públicos del instituto a abstenerse de hacer cualquier pronunciamiento que tenga que ver con el expediente”.

Un grupo de senadores y analistas han advertido que permitir una fusión sin condiciones afectará a los suscriptores de televisión de paga, pues Disney y Fox concentran la mayoría de los contenidos deportivos que se transmiten por esas señales.

Los canales de Disney y Fox representan 73% de los canales que integran la programación de contenidos deportivos, mientras que entre 10% y 12% lo tiene Televisa, y de 5% a 6% está en la NFL y otros canales.

La compra de Fox por parte de Disney comenzó con una disputa en la que también estuvo involucrada la empresa de telecomunicaciones Comcast.

Luego de una intensa batalla, Disney y Fox anunciaron el 14 de diciembre de 2017 un acuerdo definitivo de compra por 71 mil 300 millones de dólares que superó los 65 mil millones de dólares que ofrecía Comcast.

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