La degradación a Categoría 2 de la seguridad en aviación detiene la recuperación de las aerolíneas del país después del confinamiento por la pandemia del Covid-19, de acuerdo con la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA).
En esa posición, las aerolíneas nacionales no pueden aumentar frecuencias, abrir nuevos vuelos o registrar nuevos aviones para transportar pasajeros entre México y Estados Unidos.
Esto pone en desventaja a las empresas mexicanas frente a sus competidores en Estados Unidos, en un momento en el que el tráfico de pasajeros entre ambos países aumentó 9% desde que inició la pandemia a la fecha.
En entrevista, José Humberto Gual, el nuevo secretario electo de ASPA, dijo que las aerolíneas estadounidenses podrían ganar entre 8% y 10% del mercado transfronterizo con México, como en 2010, cuando al país se le degradó a Categoría 2.
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“Hay más pasajeros que antes de la pandemia y ¿con quienes van a volar? Con las [aerolíneas] americanas. Y eso son fuentes de trabajo, son ingresos, es el PIB del país el que está en riesgo.
“No es tema de las aerolíneas de contratación colectiva. Es un tema nacional”, apuntó Gual.
ASPA agrupa a los pilotos que vuelan con Aeroméxico, Aeroméxico Connect y Aeromar.
El sindicato expuso que las aerolíneas tienen pedidos de varios aviones entre este y el próximo año, 28 en el caso de Aeroméxico, y al no poder volarlos en Estados Unidos tendrán que usarlos en el mercado mexicano, lo que podría causar sobreoferta de asientos y guerra de tarifas.
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“Estados Unidos es el mercado más importante para las aerolíneas mexicanas. Hay mercado en Centro y Sudamérica, pero no con la demanda.
“Y en el mercado interno generas una sobreoferta de asientos e inicias una guerra tarifaria y puede traer problemas de que alguna aerolínea pudiera caer porque no soporta esta guerra”, explicó Rafael Díaz Covarrubias, secretario general de ASPA.
De los 28 aviones que llegarán para Aeroméxico entre 2021 y 2022, 24 son Boeing 737 MAX, los cuales estaban previstos para ser utilizados en rutas hacia Estados Unidos y Canadá.
Turbulencia laboral
A pesar de que las aerolíneas mexicanas aseguraron que preservarán el empleo, el sindicato de pilotos teme que la degradación a Categoría 2 ponga en riesgo la fuente de trabajo de muchas personas.
“A los pilotos nos pudiera afectar en nuestras fuentes de trabajo porque acabamos de salir de un convenio [con Aeroméxico], en el que aportamos 360 millones de dólares para preservar la fuente de trabajo.
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“Que degraden a México puede ocasionar que no nos recuperemos rápido, las empresas no van a crecer y teníamos una recuperación pospandemia. Nos preocupa porque, si bien hicimos ese sacrificio de otorgar 360 millones de dólares para que las fuentes de trabajo prevalecieran, con esto pudiera haber recortes”, indicó Díaz Covarrubias.
Por el momento, se congelan las plazas, no hay contratación de nuevos pilotos y todo dependerá de qué tan rápido se recupere la Categoría 1.
Seguridad con aerolíneas
ASPA hizo énfasis en que la degradación a Categoría 2 en seguridad es para la autoridad mexicana, no para las aerolíneas.
“El pasajero puede estar confiado en que la seguridad de las aerolíneas mexicanas es por demás buena, los estándares son más altos por las alianzas con las aerolíneas estadounidenses.
“Pueden volar con toda la confianza del mundo, el mantenimiento, la capacitación de los tripulantes, el despacho y control es de lo mejor. Tenemos un estándar a nivel mundial”, destacó Díaz Covarrubias.
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ASPA confía en que antes de que concluya el año, México podrá recuperar la Categoría 1 en seguridad en aviación.
Adicionalmente, José Humberto Gual considera que el país requiere una política aeronáutica que regule el mercado y garantice el crecimiento ordenado de las aerolíneas para evitar quiebras como las de Mexicana, Aviacsa e Interjet, ya que la aviación comercial contribuye con 2.3% del PIB.
Aunque esta propuesta tendría que surgir de las Cámaras del Congreso de la Unión.