Más Información
Por Lilia Saúl Rodríguez
Quieres cruzar la calle. Esperas a que se ponga el siga. Observas que el “humanito” que debía aparecer en el monitor, al otro lado de la calle, para avisarte cuánto tiempo te queda para pasar, es inexistente.
Cruzas bajo tu propio riesgo, rogando que no se ponga el verde justo cuando vas a mitad de la avenida. Llegas a la otra esquina. Y entonces observas al policía de tránsito.
Le cuestionas por qué no sirve el monitor. Y le preguntas si él o tú debes informarle a “quien sea el responsable” de la falla.
--Uyyy señito, eso está difícil. Es una empresa la que revisa todos los semáforos y de paso, las luces de estos monitores. Pero sólo tienen 100 personas para todo el DF y sólo en una delegación, hay más de 100 mil semáforos. Así que no creo que pasen pronto por aquí…
El rostro de indignación no se hizo esperar. Pero también te interesas en la charla del policía. Que si hay empresas para pintar esas rayas que todos vemos en los cruceros. Que las empresas para las cámaras que cuelgan de los semáforos. Que la empresa para recoger la basura. Que la empresa de los anuncios verdes.
Afortunadamente ahora con las leyes de transparencia, podemos preguntar información relacionada con esas empresas y aún más. Podemos saber qué funcionario público es el responsable de dicha área, cuánto personal tiene a su cargo y qué presupuesto es el que tiene para realizar obras, remodelaciones o mejoras en general.
En México y en la mayoría de los países se celebra el 28 de septiembre el Día Internacional del Derecho a Saber.
Y a más de diez años de distancia –la primera Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental ya cumplió su década—pareciera que hay más avances que retrocesos, pero no es así. Al revés.
Y contamos: Amparos por parte de dependencias que no quieren entregar información, caídas misteriosas del sistema Infomex cuando justo estás haciendo la solicitud de tu vida, negativas a tu derecho a saber, cuando estás más que seguro que sí te tienen que entregar la información, solicitudes que pides y te dan lo que no pediste y lo tardado que puede resultar el hecho de esperar 40 días hábiles para que te entreguen una respuesta que, en ocasiones, no supera los dos párrafos (y piensas…se hubieran ahorrado el papel!).
Sí. Tenemos mucho en contra. Pero tenemos que insistir. Por esa razón, México Infórmate continúa impulsando el Derecho a Saber, como lo ha venido haciendo desde hace ya una década.
Por ello siempre decimos: Utiliza el Derecho de Acceso a la Información. Porque ¡Derecho que no se usa, se echa a perder!
