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México padece un “déficit de ciudadanos” debido a la desigualdad social que prevalece en el país, por lo que especialistas coincidieron en la necesidad de fortalecer la construcción de esa ciudadanía a fin de que se involucre en los asuntos nacionales y abone al federalismo y a la democracia.
Al inaugurar el sexto foro del Seminario Federalismo Constitucional Mexicano, organizado por EL UNIVERSAL, Salvador Vega y León, rector general de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), resaltó la obligación de las universidades públicas para adentrarse en temas de pertinencia nacional que impactan en la interacción de la sociedad, por lo que el trabajo de estas instituciones es hacer un balance a través de métodos científicos y grupos de discusión para generar ideas que mejoren las relaciones entre los ciudadanos.
Expresó que la UAM y El Gran Diario de México conjuntan esfuerzos para esbozar el impacto del federalismo constitucional en el país a través de la discusión de su importancia.
El rector de la UAM consideró que este concepto se ha convertido “en un baluarte que no puede pasar desapercibido... La esencia del federalismo coincide con los valores de integración suma de esfuerzos, compromiso mutuo, respeto por las ideas del interlocutor y solidaridad, tan necesarios en tiempos como los que hoy vivimos que parecen olvidar la tradición mexicana forjada en el apego a los principios”.
Juan Ramón de la Fuente, coordinador del Consejo Editorial Consultivo de EL UNIVERSAL, planteó para el desarrollo de la discusión en el seminario cómo encontrar un equilibrio entre la soberanía de los gobiernos estatales sin que ello represente que cada uno haga lo que quiera, además de cómo poner en práctica el pacto federal para que atienda la heterogeneidad de los estados y los municipios.
“Antes todo el poder de los gobernadores dependía de la conciencia del príncipe, el problema es que pasamos a un príncipe sin conciencia, que fue lo que pasó con la primera alternancia. Se soltó absolutamente todo y los gobernadores empezaron a hacer lo que les venía en gana. Sí, estados soberanos, pero que no quiera decir que cada uno haga lo que quiera”, enfatizó.
Arturo Núñez, gobernador de Tabasco, comentó que en el terreno del régimen democrático moderno México se encuentra “debutando en muchas cosas”, por lo que fue “prematuro” aprobar la reelección de los gobiernos municipales, puesto que “los alcaldes utilizan presupuestos para que su partido permanezca en el poder.
“Para que se mantengan ellos personalmente en el poder, no sólo su partido, podría haber un manejo de más recursos públicos. No es la democracia sino la plutocracia lo que define las elecciones”, aseguró.
Enfatizó que existe un déficit de ciudadanos, derivado de la “brutal desigualdad social”.
Ricardo Rapahel, columnista de esta casa editorial, destacó que el federalismo es un tema que siempre está presente y actualmente tiene mayor cabida “a la luz de una serie de problemas que tiene el país, especialmente en el trazo de fronteras no definido, el cual está provocando problemas”.
Resaltó que EL UNIVERSAL se dio a la tarea de colocar la discusión de este tema en el marco de los festejos por su centenario, por lo que se asoció con distintas universidades para abordar los temas más urgentes respecto al federalismo constitucional. “Si está vigente más allá del término legal, si el articulado de la Constitución responde a nuestra realidad o debe modificarse”.
Destacó que las propuestas emanadas de este seminario se entregarán al Senado de la República en febrero de 2017, con motivo de los 100 años de la Carta Magna.
Durante la mesa Transición del Poder Local y la Democracia Mexicana, Mauricio Merino, articulista de El Gran Diario de México comentó que hay una correlación cuando los gobiernos no entregan buenos resultados y la disminución por el aprecio a la democracia, lo cual atañe a los partidos políticos, senadores, diputados y a los gobiernos locales; sin embargo, la relación entre los buenos resultados y el aprecio por este régimen de gobierno no es tan clara.
Urgió a repensar los perfiles del federalismo “sin poner en riesgo el aprecio por la democracia, lo peor que podría pasar es que la cultura presidencialista acabe por borrar del mapa al federalismo”.
“Para que la democracia sea apreciada hacen falta otras variables que incluyen participación ciudadana, cultura cívica, aprecio por el Estado de derecho, mecanismos de rendición de cuentas, vigilancia de las actividades de gobernantes, entre otros”, dijo.
Destacó que en México es particularmente dramática esta relación, puesto que los resultados de los regímenes plurales y de la transición democrática del cambio de siglo “francamente son menores a lo que las expectativas nos hacían creer”. Detalló que esas expectativas se generan respecto a temas de largo plazo, relacionados con la desigualdad de los ingresos, la cual se mide en las expectativas de la mejora de los ingresos, así como la reducción de la inseguridad, violencia y corrupción que se vive en el país.
Explicó que hay dificultades que se han cruzado para la entrega de buenos resultados, como es el diseño constitucional e institucional del federalismo, así como la relación entre mayores facultades a los gobernadores y mejores resultados, la cual no se ha concretado, puesto que cuando los gobernadores han tenido mayores atribuciones los resultados “no han sido mejores en general, no han sido mejores en materia de distribución de ingreso, disminución de la violencia y corrupción.
“A todas luces la distancia que hay entre los resultados que entrega la democracia y la expectativa generada por la alternancia se ha convertido en un desafío, en el que la mayor parte de los mexicanos perifería un régimen autoritario a resolver el régimen democrático, confundiéndose con los malos resultados que entrega. Es muy urgente repensar el diseño institucional de gobiernos estatales y municipales”.
Enrique Alfaro, alcalde de Guadalajara, comentó que México no está exento del contexto internacional en el que se vive un “desmantelamiento” del concepto Estado-Nación, el cual se asocia a la necesidad del resurgimiento de liderazgos locales y regionales para sustituir problemas.
