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Esta noche es la última de 2015; lo que pasará a partir de las primeras horas de 2016 es tan impredecible como el año entero.

Si eres de los que esperan encontrar el amor, o quizás ampliar tu familia, no estás solo. Hay unos pequeños amigos en la Ciudad de México que tienen el mismo objetivo y cuyo esfuerzo será un ejemplo para todos los que consideran que el entorno y las circinstancias desconocidas son pretexto para no alcanzar los sueños.

Los pingüinos del Acuario Inbursa están en eso.

Son 16 —siete hembras y nueve machos, de entre los tres y 11 años—; la idea de los encargados del lugar es que el año que viene amplíen su familia.

“Tenemos los hábitats de reproducción: van medusas, caballitos de mar y el reto más grande que tenemos y que esperamos que este año que viene se cumpla, son los pingüinos”, explica Itzel León, coordinadora de marketing del lugar.

“La reproducción de ellos es muy padre porque, cuando van a hacer el apogeo, a la hembra les dan una piedrita, y si la hembra la recibe quiere decir que ya se decidió por él, y eso quiere decir que van a estar juntos toda su vida. ¡Ellos sólo tienen una pareja en toda su vida”, detalla.

Entre los factores que podría hacer del próximo el mejor año de nuestras vidas, como la de estos ovíparos, está el de la planeación. Por eso puedes pasar las primeras horas de 2016 de manera entretenida, ya sea que optes por ver a nuestros amigos de la Antártida mañana desde las 12:00 o incluso hoy, de las 10:00 a las 16:00 horas.

“La gente que vino al principio (cuando abrió el Acuario), si se dan una vuelta ahora van a encontrar cosas nuevas, no siempre es lo mismo. Tenemos especies nuevas, ahora tenemos la nueva especie de los pingüinos barbijo que son chistosos y hasta raros”, asegura Itzel.

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