El Servicio de Administración Tributaria (SAT) devolvió por impuestos 75 mil 201 millones de pesos en el primer bimestre del presente año, la cifra históricamente más alta desde para un periodo similar que se tiene registro.

El monto de reembolsos que hizo el brazo recaudador del país fue 41.4% superior al del mismo lapso del año pasado, de acuerdo con cifras de la institución.

Entre enero y febrero del año pasado, el fisco regresó 53 mil 201 millones de pesos, lo que indica que en 2017 se entregaron 22 mil millones más.

Los contribuyentes que cumplieron sus obligaciones fiscales y tienen el derecho de recibir la devolución de parte del SAT tras obtener un saldo a favor fueron socorridos principalmente por el Impuesto al Valor Agregado.

Tan sólo por este gravamen, el fisco registró una devolución de 72 mil 123 millones de pesos, una cifra sin precedente en el periodo en cuestión.

El grueso de estos reembolsos se dio en enero, con 41 mil 860 millones de pesos, y en febrero la cantidad que se autorizó transferir a los contribuyentes fue de 30 mil 263 millones.

En enero de este año, los registros de recaudación tributaria estuvieron por debajo de lo programado. Las autoridades hacendarias explicaron que el motivo por el que obtuvieron menos recursos de los calculados fue porque se hicieron mayores devoluciones.

El segundo gravamen que generó más devoluciones fue el Impuesto Sobre la Renta, por el que se entregaron 2 mil 358 millones de pesos.

No se trata de la mayor cantidad devuelta por este concepto en los registros del SAT. De acuerdo con la información de la dependencia, los años en que se canalizaron más recursos a los contribuyentes por ese tributo fueron en 2012, cuando entonces se entregaron 4 mil 476 millones de pesos, y
en segundo lugar quedó el reporte de 2014, cuando se reembolsaron 2 mil 786 millones.

Los otros gravámenes que generaron devoluciones fueron el IEPS, el ICE, el ISAN, los accesorios y otros impuestos. En conjunto estos conceptos sólo representaron 721 millones de pesos por el tema de transferencias.

Otra particularidad sobre el monto histórico de las devoluciones es que respecto a ejercicios de administraciones federales pasadas, la contabilización de estos recursos entre 2013 y 2017 se da sin la participación de gravámenes que no existen ahora, pero que en el pasado sí.

Es el caso del impuesto empresarial a tasa única y el impuesto a los depósitos en efectivo, conceptos que
existieron en el sexenio pasado, pero que se derogaron durante la actual
gestión.

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