Los reportes de seguridad pública y vandalismo que han generado los concesionarios de transporte por tren en México, como Ferromex y Ferrosur, de Grupo México, y Canadian Pacific, antes Kansas City Southern, alcanzaron niveles máximos al cierre de 2022, de acuerdo con cifras de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF).

Los datos correspondientes al año pasado del organismo adscrito a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), los más recientes, dan registro de 16 mil 2 reportes de seguridad vial, un crecimiento de 5.5% respecto a los 15 mil 170 de 2021.

El reporte de la agencia, denominado Anuario ferroviario, detalla que respecto a 2017, año en que comenzó el registro, el incremento es de 26.8% sobre un total de 12 mil 619 eventos ocurridos.

La ARTF comenzó a operar en 2017 en busca de que el sector fuera regulado e impulsado por un agente autónomo y no directamente por la dependencia federal.

“El término seguridad pública se acuña a eventos reportados de robo y vandalismo, tanto al tren como a la vía”, señala el reporte.

Más trenes

Esta situación se presenta mientras el actual gobierno pretende desarrollar más los trenes de pasajeros.

El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo recientemente que, a través de un decreto, va a promover que en las vías concesionadas operen ferrocarriles de pasajeros. Anticipó que el 20 de noviembre se publicará ese ordenamiento.

Las concesiones fueron otorgadas entre 1996 y 1997 para impulsar la mejora del transporte ferroviario, particularmente el de la carga, que se había relegado ante el auge que tuvo el traslado por carretera a raíz del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.

Sin embargo, esas concesiones se dedicaron a la inversión en las vías ferroviarias y la adquisición de equipo de tracción para la movilización de carga, no así para el transporte de pasajeros, el cual se había convertido en un servicio lento y deficiente en los últimos años de la estatal Ferrocarriles Nacionales de México, ante la falta de inversión pública.

Posteriormente llegó la privatización de los ferrocarriles, y se estima que en la actualidad las empresas han invertido más de 14 mil millones de dólares en la mejora de la infraestructura y el transporte, y ahora tienen servicios comparables con los de Estados Unidos.

Sin embargo, enfrentan problemáticas como bloqueos, robos, vandalismo y problemas sociales, como accidentes en cruces ante la invasión del derecho de vía, y baja cultura de adopción de este transporte.

Esta propuesta ya se había publicado en junio de 2020, y se destinaron 41 millones de pesos para estudios de planeación estratégica integral a largo plazo (50 años).

Las pláticas han avanzado y Grupo México Transportes, de Germán Larrea, informó que está abierto a colaborar con el gobierno en el plan para reactivar trenes de pasajeros.

“Estamos en etapas muy iniciales, veremos si deben realizarse estudios”, dijo hace unos días Isaac Franklin, director de Administración y Finanzas de Grupo México.

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