En la pasada administración, un grupo de “sabios” de la comunicación convocaba a directores editoriales de medios a una oficina en la residencia oficial de Los Pinos, ahí, el vocero y sus empleados les presentaban un documento en PowerPoint, en el que con esferas de diferentes colores y tamaños representaban las notas positivas, las negativas y las neutras. Siempre, las esferas de las negativas eran las más grandes. Tras la explicación “científica”,  venía el llamado de atención diciendo que el medio se estaba portaba mal y que eso ya le preocupaba al Presidente Peña Nieto. Se entregaba una copia de ese informe a los directivos para que reflexionaran, mismo que siempre acababa en los botes de basura. Ahora, ya no son esferas sino listados; la presión y los regaños no son en privado, sino en público y trasmitidos por los canales del gobierno federal desde Palacio Nacional y desde el atril presidencial con el escudo nacional. Es decir, las cosas, en el fondo, no han cambiado, la única diferencia es que antes eran esferas y hoy son listados.

Que no le digan, que no le cuenten, porque a lo  mejor le mienten

Llama el presidente Andrés Manuel López Obrador tendenciosos, sesgados, mentirosos  a medios y periodistas que cometieron el pecado, según un monitoreo del INE, de tener más notas “negativas” sobre Morena que sobre los partidos de oposición. ¿Y eso es mentir?  Por ejemplo, en abril pasado, ya en pleno proceso electoral, los medios reportaron que elementos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México detuvieron al diputado federal de Morena, Benjamín Saúl Huerta Corona, por una denuncia que hizo un menor de edad en su contra, por agresión sexual. A esa denuncia se sumaron otras y ahora se busca el desafuero del legislador. Desde luego que es una nota negativa para Morena, pero no es una mentira, ni los medios que la publican están cometiendo alguna falta o deshonestidad al hacerlo. La presunta falta y la presunta deshonestidad, que mancha a su partido, es  la que presumiblemente cometió el diputado, los medios solo reportaron un hecho muy negativo para Morena. Así que no le digan, que no le cuenten, porque a lo mejor le mienten. Y luego dicen que el Presidente no estigmatiza a medios y periodistas.

Ebrard enmienda un error

A finales de abril pasado el canciller Marcelo Ebrard viajó a Rusia y de pronto se anunció que de ahí se pasaría a España. Así fue, don Marcelo estuvo en España el 30 de abril pasado, básicamente, para resolver "el olvido" que se tuvo de invitar al Reino de España a la celebración del Año de la Independencia y la Grandeza de México. Nos hacen ver que en Palacio Nacional, en la lista original, no se tuvo a bien lanzar la invitación a España para los festejos que se llevará del 15 al 27 de septiembre próximo en México, así que Ebrard fue enviado para enmendar el error que ya desde el país Ibérico fue notado y muy tomado en cuenta.

Una fake news en el Senado

Si por “austeridad” en el Senado de la República ya no contratan asesores, por lo menos deberían usar internet, que no tiene un gran costo, para buscar información. O ya en un derroche de recursos públicos, hacer una llamada de larga distancia a la embajada de Haití para enterarse bien de las noticias que acontecen en ese país caribeño. Ayer, el Senado dio por fallecida a la primera dama de Haití, Martine Moïse, quien sobrevivió a un ataque armado en su residencia. Sin embargo, el  presidente de la Comisión Permanente, Eduardo Ramírez, pidió minuto de silencio y condenó asesinato del presidente Jovenel Moïse y su esposa. Ningún legislador reparó en la fake news durante la sesión de más de tres horas.