Falta un mes para que finalice el último periodo ordinario de la 64 Legislatura y definitivamente desapareció de la agenda el intento de lavar dinero por medio del Banco de México. Cabe recordar que en diciembre pasado el Senado aprobó una reforma, que presentó el coordinador de Morena, Ricardo Monreal, para modificar la Ley del Banco de México, para que este órgano autónomo comprara todos los dólares circulantes en el mercado sin importar procedencia. Incluso en la Cámara de Diputados se abrió una mesa de trabajo entre senadores, diputados, Secretaría de Hacienda y Banco de México para ver modificaciones de este proyecto. Por fortuna, no parece haber intención, ni siquiera del promovente de esta idea, de avalar esta minuta. Todo indica que las presiones de actores económicos externos también han cesado, así que no hay incentivos desde ningún ambito para meterse en esta camisa de once varas.

Se apuran con el cambio petrolero

Como se lo adelantamos en este espacio, los legisladores de la llamada Cuarta Transformación alistan un fast-track para la iniciativa petrolera del presidente Andrés Manuel López Obrador. Nos cuentan que se acordó que solamente haya un debate de ocho expertos el próximo martes, pero nos adelantan que es muy probable que la misma en la próxima semana sea avalada en la Comisión de Energía e inmediatamente enviada al pleno. Esta iniciativa todavía faltaría ser analizada y revisada por el Senado y quieren que quede el mayor tiempo restante posible, antes de que concluya el periodo ordinario por si hay cambios. Lo que es una realidad es que esa reforma debe estar avalada antes del 30 de abril porque ese día finalizan los periodos ordinarios de la 64 Legislatura donde la 4T tiene mayoría. ¿Ni una coma se le moverá?

Gobernación y los migrantes

La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, decidió darle marcaje personal a la atención del caso del homicidio de Victoria Esperanza Salazar Arriaga, por lo que activó diversos organismos dependientes de la Segob como es el caso de Conavin y el Instituto Nacional de Migración. El objetivo que le trazó a las áreas a su cargo fue claro: evitar impunidad y apoyar en todo lo posible a su familia. En ese contexto se explica que en Jueves Santo hablara vía telefónica con la mamá de la víctima; coordinara apoyos para su familia con el gobernador de Quintana Roo, Carlos Manuel Joaquín González; e impulsara que el INM le entregara a sus hijas tarjetas de visitantes por razones humanitarias. El problema es que el tema del control migratorio, contrario a lo que ocurría en otras administraciones, ya no recae únicamente en Gobernación, por lo que este trato hacia la familia de Victoria no tiene garantía de repetirse hacia otra víctima migrante.