Texto: Carlos Villasana y Ruth Gómez
Disewo web:
Miguel Ángel Garnica
A pesar de que en la actualidad las edificaciones de concreto son comunes en la capital, este material llegó apenas a inicios del siglo pasado con la edificación del inmueble del entonces Ministerio de Relaciones Exteriores . Esta construcción se ubicó en la calle de Juárez , cerca de la Glorieta del Caballito.
El maestro en ingeniería Óscar Minor García explica en entrevista que esta construcción fue la primera obra importante que se edificó en la Ciudad de México con concreto reforzado.
“La diferencia entre el concreto normal y el concreto reforzado es que el primero es sólo la mezcla de cemento, agua, arena y grava, y el segundo, por otro lado, es el que utiliza barras de acero para suplir la poca resistencia a la tensión que tiene el concreto”, dice.
Según el experto, el concreto como material de construcción fue desarrollado en la segunda mitad del siglo XIX, principalmente en Francia. A finales de ese siglo, en México podían conseguirse sacos de cemento importados desde Inglaterra y Bélgica.
El restaurador Rafael Fierro Gossman comparte en su blog Grandes Casas de México, que en 1901 se estableció la primera empresa constructora de concreto armado en el país, dirigida por el contralmirante Ángel Ortiz Monasterio, el ingeniero Miguel Rebolledo y el coronel Fernando González.
De acuerdo con el restaurador, la primera obra significativa con esta técnica se construyó en Mérida, Yucatán, pero la primera en la Ciudad de México fue el inmueble del Ministerio de Relaciones Exteriores .
En un inicio, este material se utilizó tanto en losas de cimentación como en pilotes, refiere Minor García.
El Ministerio de Relaciones Exteriores se ubicó en la que previamente fuera casa del tesorero del gobierno porfirista, Francisco Espinosa.
Según Fierro Gossman, en 1901 el gobierno pagó “300 y tantos mil pesos” para adquirir ese inmueble y en 1903 se dio la instrucción al arquitecto Nicolás Mariscal de renovar la cimentación con concreto reforzado.
Son pocos los documentos que registran cómo era el inmueble a principios del siglo XX y previo a 1964. Colección Villasana - Torres.
El restaurador cita “un fascinante documento” fechado en abril de ese año, dirigido a Ignacio Mariscal, ministro de Relaciones .
“La ventaja de trasladar ahí las oficinas es que la casa de don Francisco requerirá muy pocos arreglos para hospedar la dignidad de su ministerio y transformarlo en meritorio cartabón para la acogida de notables extranjeros y sus emisarios… ¡Muy bien lucirá el Águila de nuestro Escudo Nacional en la fachada!”.
El antiguo edificio de la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Glorieta del Caballito en la década de 1920. Colección Villasana - Torres.
En mayo de 1903, la revista El Arte y la Ciencia , publicación mensual de Bellas Artes e Ingeniería, reportó que el arquitecto Nicolás Mariscal había hecho un estudio previo a la adecuación del inmueble como sede del Ministerio de Relaciones Exteriores.
“Las dos casas con frente a la tercera calle de Colón tienen una distribución enteramente inadecuada a las necesidades de las oficinas públicas, por lo que en su concepto se deben derribar y sustituir por amplias y sencillos salones en la parte alta, destinados a las secciones y por otros semejantes en la planta baja para el archivo”.
Nicolás Mariscal se apegó al estilo de la fachada y unió los terrenos a través de la escalera monumental del edificio principal.
En entrevista con este diario, el arquitecto Alejandro Leal afirma que entre las intervenciones más significativas que se le hicieron al edificio, además de la antes referida, fue la sucedida entre 1922 y 1924.
En ese momento el inmueble fue “modernizado” por el arquitecto Carlos Obregón Santacilia , quien añadió un nivel más y le otorgó su aspecto definitivo, hasta que fue demolido en 1964 a causa de la ampliación del Paseo de la Reforma.
El antiguo edificio de la Secretaría de Relaciones Exteriores, ubicado en la avenida Juárez entre Rosales y Humboldt, poco después de su remodelación en 1922. Esta construcción fue demolida durante la ampliación del Paseo de la Reforma hacia el norte en 1964. Imagen de Luis Márquez en "Una ciudad imaginaria" / Colección Villasana - Torres.
Durante esa remodelación, el conjunto escultórico, que adornaba la fachada fue retirado y resguardado. Se trataba de esculturas diseñadas en 1908 por el artista Enrique Guerra, con forma de mujeres que representaban a las cuatro virtudes: fortaleza, justicia, prudencia y templanza.
El escultor jalapeño Enrique Guerra esculpiendo una pieza de las cuatro virtudes, antes de ser colocadas en el antiguo Ministerio de Relaciones Exteriores cercana a 1910. Cortesía Jonathan Marcial Mendoza, de “Xalapa en el tiempo”.
Guerra creó las piezas en yeso , luego las envió a Italia para que las hicieran en mármol . En 1910, poco antes de ser inaugurado el edificio del Ministerio de Relaciones Exteriores por Porfirio Díaz , fueron colocadas en la parte superior de la fachada.
En 1931, el presidente Pascual Ortiz Rubio ordenó que las piezas fueran trasladadas al Bosque de Chapultepec, pero el entonces gobernador de Veracruz, el coronel Tejada, solicitó al presidente que algunas de ellas fueran llevadas a Jalapa, ya que Enrique Guerra era oriundo de ese lugar.
La petición fue aceptada y tres de las cuatro esculturas se enviaron al antiguo Paseo del Ayuntamiento de esta ciudad, donde permanecen desde 1931, comparte el cronista Jonathan Marcial.
La cuarta estatua, La Templanza , fue instalada en una de las fuentes del Bosque de Chapultepec, la cual inmediatamente adoptó su nombre: Fuente de la Templanza. Este lugar se conserva hasta la fecha en la primera sección de este parque urbano.
La fuente de la Templanza (al fondo) en el Bosque de Chapultepec a inicios de los 60. Colección Villasana-Torres.
En 1979, el Gobierno de Jalapa mandó realizar una réplica de La Templanza para que las cuatro virtudes estuvieran juntas, como en el diseño original. De acuerdo con el Marcial Mendoza, en la actualidad Las Virtudes se encuentran en la parte trasera del Parque Juárez , en la capital de Veracruz.
Postal de las tres virtudes en la década de los años treinta en lo que conformaba el Paseo del Ayuntamiento. Imagen: Rafael Medina Mateos / Cortesía Jonathan Marcial Mendoza, de “Xalapa en el tiempo”.
Las Virtudes vistas en 2005, como se mantienen en la actualidad. Imagen: Tomás Méndez. Cortesía Jonathan Marcial Mendoza, de “Xalapa en el tiempo”
Sobre el inmueble del Ministerio de Relaciones Exteriores , el arquitecto Alejandro Leal comenta: “Era un edificio con certeza valioso que lamentablemente quedó en el camino de una idea que también era potente y promisoria como fue la extensión al norte del Paseo de la Reforma, pero que no obstante, trajo consigo la destrucción de este inmueble y muchos otros”.
“Asimismo, hasta la fecha, como sabemos, no son iguales la parte original del Paseo de la Reforma que la agregada, es decir, realmente no se logró el objetivo de extender el paseo. Solamente se perdió el patrimonio arquitectónico”, concluye el experto.
Fragmento de una nota publicada en este diario, donde se informaba de la demolición del inmueble de la entonces Secretaría de Relaciones Exteriores, 1963. Hemeroteca de EL UNIVERSAL.
Nuestra fotografía principal es la misma que la foto comparativa antigua: una imagen del Ministerio de Relaciones Exteriores en 1915, la cual pertenece a la colección Villasana-Torres. La fotografía actual es de Ruth Gómez.
Fuentes:
Blog Grandes Casas de México del restaurador Rafael Fierro Gossman.
Revista El Arte y la Ciencia , 1903.
Entrevistas a:
- Arquitecto Alejandro Leal.
- Cronista Jonathan Marcial Mendoza, de “Xalapa en el tiempo”.
- Maestro en Ingeniería Oscar Minor Garcia.
