Texto: Cristina Hernández
En los años 20 la cerveza se consideraba una de las mejores bebidas del país, incluso se publicitaba como un remedio casero. Un ejemplo de ello fueron los anuncios de Carta Blanca, los cuales mostraban sus “bondades” y hasta se consideraba un “complemento alimenticio” que daba energía y mejoraba la salud.
Se explicaba cómo diferenciar la pureza de la cerveza de dicha marca, en comparación con otras bebidas similares y la forma de hacerlo era poniéndola contra la luz para ver su “extrema claridad”.
Más que una bebida alcohólica se describía como un “acompañamiento nutritivo” para combinar con los alimentos, pues se hacía con la malta más fina. Se le atribuían bondades hasta para los niños pequeños, tal como muestra este anuncio en el que se resaltaba como "un alimento puro y nutritivo".
“Su hijo se beneficiará tomando Carta Blanca-el alimento más nutritivo”, se leía acompañado del dibujo de un bebé sano junto a una botella de cerveza.
La bebida de los hombres de negocios
Otro de los anuncios describía que cuando los hombres de negocios se reunían, usualmente tomaban Carta Blanca. “Hombres de criterio indiscutible y refinado gusto que saben distinguir lo mejor y lo exigen siempre, toman invariablemente Carta Blanca”, iniciaba la descripción de la nueva presentación de la cerveza “ahora en cartones corrugados con 25 botellas cada uno”.
En otro de ellos se mostraba un dibujo de un paisaje de fondo, en el que había un velero en un lago y un pescador en la orilla. Cerca del agua, sentados en el pasto, una mujer y un hombre en un día de campo y junto a ellos una caja con la leyenda “Cervecería Cuauhtémoc” en referencia a las 25 cervezas Carta Blanca.
A la mujer se le ve sonriendo y levantando un vaso como invitando al pescador a beber con ellos. “La cerveza Carta Blanca aumenta la alegría de toda festividad porque a todos les gusta. Su dorada transparencia cautiva la vista; su exquisita fragancia abre el apetito y su sabor es delicioso”, se lee en la promoción.
Más adelante aseguraba que era perfecta para los días de campo y excursiones campestres al momento de acompañar un refrigerio al aire libre. Era eficiente para “apagar la sed” al tomarla fría en medio de los soleados días. Hasta aquí el viaje para recordar cómo eran algunos anuncios en los años 20.