El 13 de enero de 1968, Johnny Cash ingresó con su grupo en la cafetería de la prisión de Folsom, en California, Estados Unidos, proporcionando una alegría a los reclusos, al presentar un concierto que se considera un hito en la historia de la música popular. Fueron de hecho dos conciertos grabados por Columbia Records y aunque antes en San Quintín en 1959 ya lo habían hecho, el clamor de los reclusos al escuchar: “Well I shot a man in Reno” Es estremecedor.
Un poco más de cincuenta años después, los Tigres del Norte de Mocorito, Sinaloa organizaron dos presentaciones tanto para la población masculina, como la femenina del penal de Folsom. Ambos eventos documentados por Netflix; con el fin de conmemorar el concierto de Cash y a la vez recordar que la primera actuación en territorio gabacho como se diría coloquialmente de los Tigres, fue en 1969 en la prisión de Soledad, en el Valle de Salinas, California. El paso del tiempo el porcentaje de población de origen latinoamericano en las prisiones ha crecido, en California el 41% de la población es de ese origen.
Su música canaliza la experiencia de los migrantes. Retrata las vidas de los mexicanos y latinoamericanos que han dejado su país para buscar el sueño de mejora.
Hace más de 13 años escribí sobre un querido amigo que vive en la Gloria, Guillermo Hernández apasionado del corrido mexicano y que viajó extensamente por México, para documentar sus orígenes.
Bajo su dirección, el Centro de Investigación de Estudios Chicanos montó en 1998 -con la colaboración de la fundación Arhoolie y el Museo Fowler de UCLA- una muestra dedicada al corrido, que eventualmente hizo una gira en Estados Unidos patrocinada por el Instituto Smithsonian .
En octubre de 2001, Guillermo inició la preservación digital de música mexicana y mexicana-americana vernácula en español en el país en el que vivió muchos años habiendo nacido en San Luis Potosí. Era difícil adivinar que tenía un doctorado en literatura medieval de Berkeley, pues su pasión era descubrir con admiración las miles de historias anónimas de mexicanos en su migración por los Estados Unidos, todas conmovedoras y motivantes.
Cuando platiqué con él, se extendió sobre la generosidad de Los Tigres del Norte, grupo que donó un millón de dólares para la creación de un fondo en la UCLA para el estudio del corrido. La pasión por esa música le surgió en 1976 a Guillermo cuando consultó el documental Chulas Fronteras, realizado entre otros por Chris Strachwitz , quien invitó a Guillermo a revisar sus archivos (más de 100 mil melodías de un lapso de 100 años).
Los Tigres del Norte , le llamaban el sexto tigre y me contó parte de la historia del grupo con una trayectoria de más de cinco décadas, ventas millonarias y giras extensas en el mundo. Desde sus inicios, la carrera fue cimentada sobre tres valores; el honor, el orgullo y el respeto.
El director musical, voz principal y acordeonista Jorge Hernández "soy el jefe de jefes señores" junto a sus hermanos Hernán, Eduardo, Luis y su primo Óscar Lara forman el conjunto.
Sus ingresos anuales rebasan fácilmente los 150 millones de dólares y crecen entre 10 y 15 por ciento anual en promedio, me platicaba Guillermo "Jorge decide dónde se hacen los conciertos, los contratos y las canciones para el próximo disco, las regalías y los planes del grupo” El Consejo de Administración lo conforman los cinco integrantes del grupo, asesorados por abogados (en temas de patentes, regalías y contratos), contadores (en temas financieros) y desde luego digitalización, mercadotecnia y otras áreas de negocio. Con un equipo exclusivo de compositores crean alrededor de 30 canciones anuales, unas las usan y otras las venden.
Anímese a ver el concierto en Netflix; en mi opinión, hay un momento álgido que es cuando el coro de “Golpes en el Corazón” de las presas y los músicos provoca una simbiosis genuina, entre el artista y su público que nos hace empáticos con las historias y el dolor de los encarcelados mujeres y hombres.
“El modelo de negocio funciona" bien decía Guillermo, en mi caso afirmo que todas las historias pueden ser relato de negocios, y si hace años lo escribí, ahora lo reitero y a su memoria lo recordamos con un grupo musical popular, del cual se expresaba con elogio por su talento musical y empresarial; gran ejemplo de quienes saben cristalizar sus ambiciones en un país tan competitivo como Estados Unidos.
Profesor de asignatura del ITAM, Consultor y Consejero de empresas y miembro por varios años del Consejo Internacional de The Strategic Leadership Forum.
Wu 552300 4668
