De acuerdo a lo que relata Daniel Servitje, director general y presidente del Consejo de Administración de Grupo Bimbo : a las 3 de la tarde del 2 de diciembre de 1945 salió de la fábrica en la colonia Santa María Insurgentes en la ciudad de México, la primera entrega del “Super-Pan Bimbo” Su padre Lorenzo y los socios fundadores, fueron gestándola durante ese año los pasos para crear una de las empresas mexicanas más emblemáticas y con gran presencia mundial.

Entiendo que el 4 de julio se firmó el acta constitutiva y la imagen del osito tan peculiar en la marca, fue resultado de una tarjeta de navidad a la que se le agregó el gorro, delantal y pan. Una flotilla de 10 camiones cinco nuevos y cinco usados iniciaron uno de los mejores sistemas de distribución que existen en el mundo.

La inauguración de la planta se anunció en dos planas en el periódico Excélsior, por las estaciones XEW y XEQ y en los noticieros de los cines.

Hace muchos años, don Lorenzo escribió lo siguiente: "estoy muy convencido de que la empresa sea esencialmente una institución que exista para servir. Beneficia a los hombres de afuera proporcionándoles los bienes o servicios, esa es su función básica, es lo que la sociedad espera de ella. Pero también existe para beneficiar a los hombres de adentro, para que quienes trabajan en ella puedan ganarse la vida y darle sentido a lo que hacen, y para quienes han invertido en ella reciban un rendimiento razonable por ello".

Esa filosofía la mantiene Daniel, quién desde hace más de 20 años es el líder de Grupo Bimbo que se caracteriza por reconocer abiertamente lo valioso del capital humano, en el lenguaje cotidiano de quienes la integran se recompensa; el buscar, compartir y crear conocimiento.

En particular, una frase de don Lorenzo la tienen digerida en Grupo Bimbo en su quehacer y dirigir desde el día en que entran al grupo: "Si no entiendes, te explico; si no sabes, te enseño; si no quieres, te vas" Invariablemente, la comentan cuando lo creen oportuno a los externos a su organización.

Grupo Bimbo es de las pocas empresas mexicanas que miran tú a tú a las empresas multinacionales, en el transcurrir de los años han venido adquiriendo empresas en todos los continentes, desplegando su modelo de negocio y se ha profesionalizado con estructura y formación continuas.

Crecer e innovar es la constante del personal de Bimbo. La frase de "si no entiendes, te explico; si no sabes, te enseño; si no quieres, te vas" la viven día con día los integrantes de una organización, en muchos sentidos, ejemplar en el manejo del capital humano; por eso se dice que la mejor manera de predicar es con el ejemplo.

La receta que aplican es que no concibe a sus colaboradores como "recursos humanos", sino como personas a las que brinda trato justo y afecto, seguridad, oportunidades de aprender y crecer siendo útiles a la sociedad.

He tenido oportunidad de conocer a varios de sus colaboradores, quienes han tenido oportunidad de crecer nacional e internacionalmente y que están muy orgullosos de ser partícipes de un negocio diversificado y el primer lugar mundial en la industria panadera.

Hoy, como desde hace muchos años, referirse a una rebanada de pan de caja, es decir Bimbo. En su cumpleaños setenta y cinco es bueno detenerse y reconocer a quiénes con su esfuerzo diario, demuestran su amor por nuestro querido México en 33 países de este atribulado planeta.

Profesor de asignatura del ITAM, Consultor y Consejero de empresas y miembro por varios años del Consejo Internacional de The Strategic Leadership Forum.

Wu 552300 4668

Google News

TEMAS RELACIONADOS