Un homme et une femme, es una película producida y escrita por el gran cineasta francés Claude Lelouch en 1966 y fue considerada, su primer gran éxito. Obtuvo La Palma de Oro en el Festival de Cannes y el Oscar a la mejor película extranjera, su gran fotografía y su guión, fueron básicos, para obtener el máximo galardón.
El gran cineasta, fue también, productor, escritor, guionista y actor, lo que le sirvió, para tener la gran visión holística, de su excelente obra.
Y la falta de recursos económicos, lo llevó a utilizar toda su creatividad, durante el rodaje de la película, por lo caro del color, por eso hizo tomas a todo color, blanco y negro y en tonos sepias, dependiendo del tema de la escena; de hecho, la fotografía, la crítica la consideró “exuberante”.
Todos los que hemos visto la cinta, no podemos olvidar, las diferentes secuencias, donde los colores reflejan el estado de ánimo, deseado por el cineasta, al grado de convertir, a la fotografía, en un elemento primordial, de su obra.
La escena del hombre con su perro, caminando a la orilla de la playa, en tonos sepia, nos refleja una gran nostalgia y no podemos evitar, caer hipnotizados, al encontrar la belleza, en lo simple y cotidiano, del andar diario de la vida. Las tomas de los detalles, como una mirada, el roce de un dedo o la toma de un cigarrillo, muestran el sentir, detrás de las acciones.
La banda sonora, fue realizada por el compositor Francis Lai, superando las expectativas, en México y Argentina, donde la letra de las canciones, narra la historia de los personajes.
El gran cineasta francés, tuvo la visión de conjugar, una increíble fotografía, un muy buen guión, una excelente música y muy buenos actores, logrando la mancuerna perfecta, para ganarse varios galardones.
Claude Lelouch, a lo largo de su vida, realizó muchos más largometrajes, sin embargo, la película Les Uns et les Autres en 1981, fue otra hermosa producción, con más recursos económicos, donde mostró a tres generaciones y la forma como se heredan los patrones de conducta, de generación, en generación, partiendo desde la Segunda Guerra Mundial.
El cineasta en este film denotó la influencia del arte y la cultura en la civilización, la forma en que todos estamos conectados y la sentencia del escritor George Orwell, de su libro Rebelión en la granja:
“Todos somos iguales, pero algunos somos más iguales que otros”
Y aquí, es donde voy a definir las variables, detrás de su éxito.
El talento, la pasión y la asociación.
Es muy importante, tomar en cuenta, el talento, la pasión y las buenas asociaciones, para lograr un excelente proyecto, ya que, el gran director, vio como un todo, su obra, es decir, el guión, los colores de las tomas, la música e incluso la letra de las canciones, todo estuvo conectado.
Un buen proyecto, tiene un muy buen principio y un muy buen final, es decir, el inicio y la conclusión, deben ir dentro de un equilibrio, la energía, debe permanecer constante, nunca debe de decaer.
Por lo mismo, es muy importante, realizar, una obra, que nos apasione, que vaya ligado a nuestro proyecto de vida y que seamos conscientes, que al hacerlo, nos elevemos al llevarlo a cabo.
La próxima vez, que busquemos realizar un proyecto, elijamos desde lo más profundo del alma, con el fin de escoger aquello, que nos edifica y nos convierta en mejores seres humanos, desde ahí, entonces, vendrá un éxito.
Y recordemos, el éxito, como todo en la vida, es relativo.
Lo que puede ser un éxito para uno, puede no serlo para el otro...
