Está en el aire la decisión de reanudar el .

Interesantes puntos de vista de los especialistas en los medios deportivos, algunos razonados, otros con ingrediente pasional, buenos debates, y siempre aprendiendo de los diferentes argumentos.

Para tomar la mejor decisión, debemos revisar las áreas involucradas; no sin antes reconocer el impacto económico que ha provocado esta crisis, que es devastadora para todas las partes. El objetivo es buscar la resolución menos perjudicial.

 

He aquí un desglose de algunos temas para analizar.

1. Autorización

Considero que esta es la parte toral; al día de hoy la curva no se aplana, al contrario, aumentan los casos de contagio y las defunciones. En varias ciudades la crisis sanitaria no disminuye; existen declaraciones de autoridades estatales prohibiendo, por lo pronto, eventos deportivos.

En la CDMX, el semáforo rojo continuará hasta el 15 de junio como mínimo. Las autoridades de salud son primordiales, y de la mano con la Liga MX, deberán elaborar, aprobar y vigilar que el protocolo (en caso de reiniciar) se cumpla cabalmente. La afición no podrá hacerse presente; habrá daño colateral a los que trabajan alrededor de los partidos.

2. Jugadores

Al ser los protagonistas, necesitan lineamientos claros, rígidos, que velen por su seguridad, y que aunque sean incómodos, se respeten y así atenuarán el riesgo al mínimo.

Esto va también para cuerpo técnico, staff, medios, seguridad etc. Prohibido porras alrededor de los estadios.

3. Televisoras y patrocinadores

Las televisoras juegan un papel decisivo, ya que al tener los prospectos de calendarios con varias jornadas dobles, se les dificulta la programación de los juegos entre semana; porque la audiencia sería muy baja, y hay que agregar el desacuerdo de los patrocinadores por los horarios y días de su exposición de marca. Se suma que están en plena renegociación de contratos por la crisis, la TV y las firmas comerciales, con los clubes y la Liga.

4. Calendario y formato

Hay diferentes propuestas para volver, que tres fechas dobles y Liguilla; otra es arrancar sólo con finales etc. lo cual causaría seguramente inconformidad en varios clubes.

Otra discusión importante es que el formato, sea cual sea, se va a encimar con el arranque del Apertura, que está proyectado para fines de julio; y esto provocaría que no haya vacaciones (los jugadores no han parado de entrenar), ni tampoco una pretemporada idónea.

Para terminar, en esos tiempos estarán en medio de las transferencias, vencimientos y renovación de contratos, que en esta ocasión serán más desgastantes.

5. Sedes y logística

Sería otro reto importante poder programar todos los partidos, tratando de que ninguno tome ventaja y que el Fair Play prevalezca.

El panorama luce muy complicado; mi opinión es que se debe cancelar por toda esta problemática; el mensaje sería que desafortunadamente al día de hoy México no está preparado para reiniciar. El balón puede esperar.

¿Usted qué opina?

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