Refrescante y motivador es el campeonato logrado por el León, lo cual ratifica la confianza en proyectos con una buena gestión, que con refuerzos que vengan a validar su adquisición, con jugadores nacionales que sin importar la edad tienen hambre de triunfo, todos se muestran comprometidos con el trabajo en equipo y se vuelven una familia sólida y con una complicidad extrema.
Obviamente, apoyados por la calidad de sus componentes, y la excelente dirección técnica. En conjunto, jugaron un futbol excelso, efectivo, que satisface cualquier gusto, y que los proyectó a un torneo perfecto y soñado.
En la fase regular, hicieron 40 puntos, ocho más que Pumas (que fue segundo lugar), perdieron sólo un partido, ganaron 12; tercer equipo con más goles y el menos goleado, redondeado por un futbol desequilibrante, que lo mismo tiene el control del balón por el dominio excelente de la posesión, que ejecuta transiciones rápidas que provocan daños al adversario.
Podríamos hablar de varios jugadores y su magnífico aporte, pero pienso que el Chapo Montes está muy por encima de todos; por mucho, el mejor jugador de la Liga, no disminuyó su nivel e intensidad en todo el torneo y su efectividad fue impresionante (lástima que no esté en la Selección).
Nacho Ambriz ha trabajado horas extra para lograr este título; lo fue puliendo, armando, dosificando, reordenando, esculpiendo y aplicando toda su experiencia y madurez en Liguillas para no desbocarse como en las anteriores; entendió los tiempos, las pausas, los manejos de partido, los cambios y así fue dominando a placer la Liga, y en esta final debilitó a los Pumas hasta vencerlos convincentemente, con lapsos de un futbol exquisito.
Hablábamos de que “cuando el proceso es más importante que el resultado, es posible repetir el resultado”, y esa es precisamente la historia de La Fiera en este campeonato; es un proyecto con una buena planeación, procesos efectivos, consistencia, continuidad, refuerzos e inversiones justificadas, gran dirección y por supuesto talento, ambición y buen futbol.
Cuando un equipo cumple con estas premisas, es gratificante cómo se puede capitalizar y consolidar todo el proceso anterior, para poder levantar el preciado trofeo. Gran trabajo de Jesús Martínez Murguía y su equipo. Ganó quien debía y tenía que ganar; ¡enhorabuena!
No puedo dejar de admirar lo hecho por los Pumas en este torneo, reitero mi incredulidad en varias jornadas, pensando que se caían; provocaron que, en lo personal, revalorara las decisiones que tomó Chucho Ramírez en un principio, las cuales eran desestabilizadoras para todo el plantel.
Mantuvieron el envión que les dio el buen arranque, Lillini sorprendió positivamente a todos, armó un cuadro que, con extranjeros y jóvenes de La Cantera, se mató en la cancha sin dejar de regar calidad futbolística y coraje. Se reencontraron con su esencia y seguramente el esqueleto del proceso estará intacto y con unos cuantos ajustes volverán a estar peleando. ¡Siéntanse muy orgullosos!
Concacaf. Esperamos un Campeón de la Liga MX; Tigres, Cruz Azul y América quieren revancha, después de la frustración provocada por lo sucedido en el torneo Guard1anes; ganar, alivianaría la decepción
