Nos cuentan que las oficinas del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) que se ubican en la Torre Latinoamericana están siendo reubicadas porque, la parecer, no se pagó la renta del inmueble. Qué barbaridad, la austeridad ahora sí que se ve y se siente... Además, nos dicen que en estas oficinas hay trabajadores de la Coordinación Nacional de Ópera y del archivo del Palacio de Bellas Artes, quienes irán a parar a un par de cuadras de ahí, en la Torre Prisma, sobre avenida Juárez, y también al mismísimo Palacio de Bellas Artes. Sin embargo, desde hace tiempo estos dos edificios han sido objeto de rumores por las cuestionables condiciones de la infraestructura, en medio de mudanzas, descuidos y protestas. Total, ¿qué más es un pago pendiente entre tanto rezago? Se supone que hay más oficinas del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura allí, habrá que preguntar por su situación... Y hablando de ópera, aunque en este caso nos informan que se trata de la Coordinación, qué lástima que el INBAL no supo aprovechar los grandes dotes del director artístico de la Compañía Nacional de Ópera, Marcelo Lombardero, para hacer intercambios y así lograr quedarse un poco más de tiempo en la Torre Latino. (Escríbanos a columnacrimenycastigo@gmail.com)

