Aunque la primera infancia tiene una gran repercusión en el desarrollo genético, físico y cognitivo, y perfila el resto de la vida de las personas, México es uno de los países que menos invierte en sus niños y niñas, pues apenas destina 0.6% del Producto Interno Bruto (PIB).
Por este motivo, organizaciones no gubernamentales denuncian que para el gobierno federal la inversión pública en la primera infancia no es prioridad y alertan que menores de seis años podrían perder la oportunidad de orientar su vida si no se destinan los recursos suficientes para ellos en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2024.
Así, Pacto por la Primera Infancia, la Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia de la Cámara de Diputados y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, insisten con urgencia en que incrementar el apoyo económico a programas clave garantizará el desarrollo vital de las próximas generaciones.
“Si bien es cierto que por cuarto año consecutivo se incrementó el presupuesto para la primera infancia, también lo es que este presupuesto es insuficiente, pues en 2024 se destinará tan sólo 2.1% del total del gasto público, proporción aun menor que lo destinado en 2018, que fue de 2.13%”.
Asimismo, destaca negativamente que “tan sólo 11.4% del presupuesto total se asignará a la educación, 5.4% a salud y únicamente 0.7% a protección social en beneficio de las niñas y niños menores de seis años. Esto es importante, pues tal y como lo demuestra la evidencia científica, la ausencia de inversión pública en el desarrollo infantil generará mayores desigualdades en el futuro”, informaron los organismos civiles.
También expusieron que las asignaciones presupuestales en salud y protección social para la primera infancia se han reducido de manera preocupante pues en el periodo 2018-2024 se han contraído en términos reales 40% y 49% respectivamente.
En el marco de la Cuarta Semana Nacional de Inversión en Primera Infancia 2023, celebrada en la Cámara de Diputados, la legisladora Ana Lilia Herrera Anzaldo del PRI, indicó que este presupuesto “raya en la crueldad” pues reduce recursos en programas de alimentación, educación, salud de la niñez y de la adolescencia.
Al respecto, Constanza Tort San Román, encargada de despacho de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), agregó que invertir en este rubro “no es un gasto” y es necesario comprometerse con las infancias.