La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés), en colaboración con el gobierno mexicano, lanzó ayer un programa para fortalecer la protección a la biodiversidad del país, la cual representa 12% a nivel mundial.
“México ocupa el quinto lugar de 17 países considerados megadiversos, con más de 10% de la biodiversidad mundial, lo cual lo hace un país atractivo para las organizaciones criminales que comercializan con especies”, dijo en conferencia virtual el representante de la Unodc en México, Kristian Hölge.
Es el primer proyecto de Naciones Unidas en México que busca fortalecer las metodologías y herramientas legales de las autoridades mexicanas en materia de delitos como el tráfico de especies, la tala ilegal y destrucción del medio ambiente.
“El objetivo principal de este proyecto de cooperación internacional tiene como misión minimizar el impacto de la delincuencia organizada en Latinoamérica, EU y Europa”, detalló Blanca Mendoza, procuradora Federal de Protección al Ambiente.
La directora General de la Unidad de Inteligencia Financiera, Mireya Valverde, destacó que “es importante detectar las cuentas sospechosas de participar en estos delitos, para poder trazar una línea de investigación”.
Mencionó que en el país existen “173 reportes de operaciones inusuales relacionadas a 219 sujetos que posiblemente estén vinculados a estos delitos”.
El encargado de la subprocuraduría Jurídica de Asuntos Internacionales (FGR), Miguel Ángel Mendoza, aclaró que el tráfico ilegal de especies también contribuye a la propagación de virus al no trasladarlos con los protocolos adecuados, siendo posible causa de futuras pandemias”.
La Unodc busca que este proyecto sea un sistema nacional de justicia fortalecido y coordinado para detectar, investigar, perseguir y enjuiciar delitos contra la vida silvestre.