Critican legación catalana en México

Madrid.— Las autoridades españolas consideran que la oficina de representación que el gobierno de Cataluña planea abrir en México servirá para desinformar y difundir las tesis de los separatistas catalanes.

“El intento del independentismo de abrir nuevas delegaciones responde a su interés de propagar, cuanto más mejor, su estrategia de desinformación que, por cierto, cada día encuentra menos eco en una mayoría de lugares", señalaron a EL UNIVERSAL fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores. “Sólo en este sentido propagandístico se puede entender el interés del independentismo catalán por contar con una presencia ahí [en México]”, agregaron las fuentes oficiales.

El Consejero de Acción Exterior del gobierno de Cataluña, Alfred Bosch, anunció el 25 de junio que la administración catalana abrirá una oficina de representación en México, que será la puerta de entrada en Latinoamérica. En un encuentro con la comunidad catalana durante su visita oficial a México, aseguró que Cataluña busca tener presencia en lugares donde nunca ha llegado, como América Latina, con el objetivo de “defender los derechos de los catalanes en todo el mundo”.

El gobierno español ha indicado en reiteradas ocasiones que las delegaciones de la Generalitat (gobierno catalán) en el exterior actúan como altavoces del independentismo, además de consumir importantes presupuestos y duplicar innecesariamente algunas de las funciones que llevan a cabo las embajadas españolas.

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, reconoció que el gobierno ibérico no puede impedir la apertura de nuevas delegaciones de la Generalitat en el extranjero, pero advirtió que se recurrirá a los tribunales si en estas oficinas de representación se incumple la ley. De hecho, instruyó a la Abogacía del Estado para que solicite medidas cautelares con el fin de evitar actividades que se están revelando perjudiciales para los intereses del Estado.

El gobierno de Madrid considera que las “embajadas” catalanas operan con criterios “manifiestamente contrarios a los principios y objetivos de la política exterior de España”, y se han utilizado como un instrumento al servicio del proceso independentista en Cataluña.

En los últimos meses, el gobierno catalán presidido por Joaquim Torra ha reabierto las delegaciones catalanas en el exterior para reforzar la apuesta soberanista. La puesta en marcha de una oficina de representación de la Generalitat en México formaría parte de esta estrategia, según las autoridades españolas.