Este ingrediente se ha utilizado desde la época prehispánica para preparar los famosos tamales; funcionaba como lo que ahora conocemos como polvo para hornear. El tequesquitl, o mejor conocido como tequesquite , es uno de los ingredientes más importantes e históricos de la gastronomía mexicana.
El tequesquite es una sal compuesta por diversos minerales como el cloruro y el carbonato de sodio. Este mineral actualmente se utiliza para cocer alimentos y fermentar masas.
De acuerdo con Delicias Prehispánicas , este producto fue utilizado por los antiguos habitantes del imperio mexicano, principalmente adjudicado a los mexicas. Pero, en ese entonces no solo se usaba para la cocina, sino que también era útil para actividades como lavar la ropa.
El tequesquite se forma de las aguas retenidas en pequeños estanques cuando el nivel de esta baja, o en temporada de sequía, en el lago de Texcoco del Valle de México. Entonces, es recolectado y vendido en piedra o molido.
indica que generalmente el tequesquite se utiliza en los estados del centro del país como levadura para aligerar y esponjar la masa de los tamales. Aunque también sirve para fermentar masas: el producto molido, mezclado con agua y cáscara de tomate, se pone a hervir, se deja enfriar, se cuela y se añade a la masa.
Otro uso que se le da es para ablandar granos de elote y de frijol, añadiendo el polvo al agua para su cocción. Sin embargo, algunos consumidores lo utilizan para cocer hierbas o nopales ya que los ablanda manteniendo su color natural, además de ayudar a la digestión.