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No hay receta mexicana que no se cite un trozo, rebanadas o, de plano, una cebolla entera para su preparación. En México, la cebolla es una planta que, como otros ingredientes, es muy popular para guisos, caldos, recetas de belleza o, incluso, para remedios contra la gripe, por su alto valor nutricional.
En el mercado existen distintos tipos de cebolla y aquí te vamos a decir para qué se usa cada uno de ellos.
Cebolla morada
Esta cebolla es la más usada en los lugares de comida delicatessen. La cebolla morada tiene su origen en Italia y su elegante color morado-rojizo-lila la destaca entre las otras especies. Su sabor es menos fuerte que la cebolla blanca, por ello se utiliza más para ensaladas crudas y emparedados con verduras. Ente sus beneficios están que tiene altos niveles de flavonoides -poderosos antoixidantes-, zinc y fósforo.
Chalota
También es una raíz pero se le atribuyen más beneficios nutricionales que el resto de las cebollas. Su uso en la cocina es especialmente requerido cuando las recetas son refinadas, pues su sabor es sutil que va entre cebolla y ajo. Pica pero también sabe dulce. Es pequeña y crece como si fueran racimos. Tiene propiedades calmantes y es superior a la cebolla blanca en vitamina A, vitamina C, tiamina y folatos.
Cebolla blanca
Es la más popular en la cocina del mundo, especialmente la mexicana. Su sabor es intenso y picante y se usa tanto cruda, cocida o frita. Cualquiera que sea su presentación, su ingesta regular favorece el sistema circulatorio, reduce síntomas de osteoporosis, es un expectorante natural.
Cebollín
Aunque es similar que la cebolla blanca, su sabor es suave y también sirve para guisos, aunque en México se prefiere asada o sofrita para acompañar los tacos de carne. Hay quienes usan sus hojas como una variente del perejil. Es una cebolla muy jugosa.
Cebolla dorada
Esta cebolla es la perfecta para una afrancesada sopa de cebolla, ya que su sabor nada picante y fuerte la hace ideal para este platillo. También se usa mucho para preparar los famosos aros de cebolla. Cuando se emplea para ensaladas, muchos chefs la combinan con aceite de olivo y vinagre y para guisos caramelizados.
Otro de los beneficios de cualquier especie de la cebolla es que se conserva bien durante bastante tiempo a casi cualquier temperatura ambiente y es tan versátil que hasta unos huevitos con cebolla y chilitos picados para el desayuno, le hacen el día a cualquiera. Provecho.
