Seis mil beneficiados pudieron disponer de alimentos y abrigo
Miles de damnificados requerían comida y los scouts fueron grandes voluntarios
El temblor del ‘85 dejó huellas y pérdidas irreparables en la ciudad de México. No obstante, la sociedad respondió compasivamente.
1985. Los comedores comunitarios funcionaron durante varias semanas
Ahora que se repite la historia, cientos de voluntarios han preparado alimentos para rescatistas y sobrevivientes
Distintos restaurantes prepararon alimentos para repartir a los brigadistas