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Pocos fueron los que se aguantaron las ganas de levantarse de sus asientos durante el concierto que la banda Reik ofreció este jueves en el Auditorio Nacional.

Ya sea para bailar con sus temas más movidos, ondear las manos al ritmo de sus baladas o simplemente tomarse las mejores selfies entre las luces que proyectaba el escenario, los fans no descansaron.

La noche tuvo espacio para el romanticismo y el desamor y los celulares se convirtieron en un momento en linternas para en otro ser micrófonos y acompañar a Jesús Navarro, Bibi Marin y Julio Ramírez desde las butacas.

En canciones como “Qué vida la mía” y “Tu mirada” el público estalló en gritos pero en otras como “Noviembre sin ti” los corazones rotos cantaron con más fuerza como si estuvieran liberándose.

“Buenas noches, Ciudad de México. Qué locura estar enfrente de ustedes otra vez en este lugar tan precioso”, dijo Bibi.

“Hay mucha gente esta noche que ha venido incontables veces a un show de Reik, probablemente son más de lo que pienso y quiero decirles con toda honestidad que sin ustedes nuestra carrera no sería posible. Yo no entiendo cómo no se aburren de seguirnos viendo, ojalá nunca se aburran”.

La noche siguió con canciones como “Invierno”, “Inolvidable” y “Creo en ti”, este último uno de los más coreados junto a “Yo quisiera”. En el público, que casi ocupó todos los asientos, disfrutaban desde parejas de enamorados hasta amigos en grupos o padres que habían asistido acompañados de sus hijos.

A los músicos los sorprendió el presidente de Sony Music, Roberto López, quien les entregó un Disco de Diamante + Oro por el sencillo “Me niego” y otro de Triple Platino por “Amigos con derechos”.

Ya en la recta final hubo más espacio para el baile con un medley urbano. Luego de cerca de dos horas la fiesta terminó a ritmo de reggaetón con “Ya me enteré”, “Amigos con derechos” y “Me niego”.

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