La denuncia interpuesta por en contra de la enfermera que atendía a su abuela, Eva Mange , así como de quienes resulten responsables, ha derivado en una investigación y posterior clausura al asilo The Grand Senior Living, por lo que los 55 inquilinos tendrán que volver con sus familiares, entre ellos doña Eva; sin embargo, la situación ha generado descontento con esos otros familiares.

Al respecto, Laura dijo a este medio que los discordantes “están en su derecho de estar en desacuerdo”, y que ella lo que hizo fue denunciar un delito.

“Denuncié un delito, señalé a la enfermera y a quien resulte responsable. ¡Lo demás no depende de mí!, el documento que subí es el resultado de las investigaciones realizadas por la fiscalía del Edomex ", comentó, enfatizando en que la vida de los demás huéspedes corría riesgo.

Este domingo Laura compartió en sus redes sociales el comunicado de prensa de la Fiscalía, donde se leen los detalles de la inspección en el inmueble de 19 pisos y 100 habitaciones.

“Luego del análisis realizado en este lugar y de verificar el estado de salud de 55 adultos mayores que se encontraban en el inmueble, esta Fiscalía General determinó el aseguramiento de las instalaciones, y por su parte COPRISEM decidió suspender la operación del asilo, ya que se detectó un riesgo inminente por la vida de los residentes del sitio, así como condiciones higiénico sanitarias no óptimas, para lo cual se colocaron los sellos correspondientes”.

Los organismos presentes en la inspección fueron la Comisión para la Protección de Riesgos Sanitarios Estatal (COPRISEM), DIFEM, Instituto de Verificación Administrativa del Estado de México (INVEAMEX), Protección Civil mexiquense, La Secretaría de Seguridad Estatal (SS), Policía Municipal y Comisión de Derechos Humanos del Estado de México.

El documento resalta la realización de pruebas rápidas de COVID-19 para los encargados de dicha inspección.

Los 55 habitantes se encuentran al resguardo de la DIFEM, quienes se encargarán de contactar a todas las familias en un plazo no mayor a siete días, para que los adultos mayores puedan ser devueltos a sus núcleos familiares.

En el lugar también había 14 trabajadores del asilo, entre enfermeras, cuidadores y representantes legales, personal administrativo y una persona de seguridad privada.

La también política agregó que por ahora está dedicada a reponer a su abuelita para poder llevársela a casa, mientras que el proceso legal siga su curso.

maf

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