Madres heredan talento pero no género musical

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A lo largo de sus carreras, Edith Márquez y Susana Zabaleta se han dedicado a promover con sus voces ritmos como el regional mexicano, el bolero y la ópera, respectivamente.

Eso no consiguió que sus hijos, ambos interesados en seguir los pasos de sus madres en el ambiente artístico, optaran por los mismos géneros, y prefirieron alternativas como el pop y el urbano como sus cartas de presentación en la escena musical.

Matías Gruener, el hijo de Suana Zabaleta y el director Daniel Gruener, a sus escasos 15 años recién lanzó “Dámelo todo”, un tema que está cargado de pop y de un género más romántico, pues aunque dice que su mamá tiene una voz de soprano y una sensualidad innegable, él se considera más romántico.

Madres heredan talento pero no género musical

Aunque el joven ya había iniciado su carrera a los 13 años en el teatro con la obra A los 13, fue tras la pandemia que decidió meterse de lleno al mundo musical, donde su mayor juez, pero también su mentora, es su madre.

“Yo estaba encerrado en mi casa, no podíamos hacer nada, mi hermana se regresó de Londres, llegó a México y me mostró la canción, me encantó tanto que la escuché una cuantas veces y quise grabarla”.

Algo similar ocurre con Sebastián, el hijo de 27 años de Edith Márquez, quien desdeniño mostró una inclinación hacia el medio artístico y, tras cuatro semestres estudiando Arquitectura, abandonó la carrera para seguir la música.

En su faceta artística el joven se hace llamar Bastian, y aunque ya había participado en musicales como Avenida Q y Las mil amores, ahora prueba en el trap, R&B y pop, con el sencillo “Como yo”.

“Mi padre decía que era una locura dedicarme a esto y mi mamá me dijo que es una carrera muy complicada, ambos me pidieron estudiar una carrera y cuando lo hice no me hallaba, sabía que ahí no era feliz y estoy aquí persiguiendo mi sueño”, dijo el joven.

Para comenzar a grabar el tema musical, el joven indicó que le pidió apoyo a su amigo Federico di Lorenzo, quien aceptó e inmediatamente le prestó su estudio.

“Desde que tengo memoria estoy en los escenarios. El primer acercamiento que tuve fue hace muchos años que toqué la batería en una presentación de mi mamá (Edith Márquez). Creo que puedo lograr cosas interesantes para mí o para otras personas”, apuntó.

Si bien Bastian admite que Edith ha sido una gran inspiración, apoyo y sobre todo maestra en el canto, sabe que desea tener una carrera independiente al nombre y apellido de su famosa madre.

Por esta razón decidió tomar como nombre artístico Bastian, y con él desea formarse una carrera por su cuenta.

“Todo ha sido muy natural, estoy en esa parte de crecer, descubrirme y experimentar. No dudo que en un futuro pueda hacer algo con mi madre pero por ahora nuestras propuestas están muy alejadas”.